El rayo que no cesa

telecinco.es 29/06/2011 09:49

Toni es el rayo que no cesa. Siento mancillar el recuerdo del gran poeta Miguel Hernández pero es la mejor manera que se me ha ocurrido para referirme al incansable espíritu batallador de este concursante de 67 años que atesora una energía envidiable. Solo con sus comentarios, la defensa que hace de Juanito (la iguana o lo que sea) por razones realmente cómicas y como prepara sus premeditados shows de las galas se puede llenar casi un resumen entero, lo cual pudimos comprobar ayer mismo.

El inacabable pozo de Toni y la relación cada vez más tierna y estrecha entre Sonia y Carolina son los dos argumentos principales en esta hora de lo ocurrido en Playa Uva. Por su lado, en Cayo Picadero, digo Paloma, es muy probable que Tatiana y Arturo pasasen una noche movida bajo la manta que el programa les preparó con gran delicadeza. Supongo que así no tendrán que censurar mucho las imágenes, además de evitarle al pobre cámara presenciar el porno espectáculo tan directamente. Ya quisieran los concursantes una mantita como esa para dormir en las frescas noches caribeñas.

La intención de incitar a la coyunda queda absolutamente demostrada si tenemos en cuenta que les dejaron siete condones al lado de la botella de vino, la manta, el aloe vera (esto no lo vi pero lo decía Tatiana) y ese líquido que no fueron capaces de identificar pero bebieron como si se tratara de una pócima mágica. A favor de la causa espero que la baja forma vista en Arturo no afecte también a su delfín. En todo caso, ya sabemos para lo que le han llevado a Cayos Cochinos, nombre que a veces suena realmente apropiado.

Si alguno de los dos inocentes concursantes que han participado de esta historia de condones, vino y lecho amoroso tras una opípara comida (según lo acostumbrado) tiene la tentación de presumir de haber sido los primeros que tienen ayuntamiento carnal dentro de Supervivientes ya se pueden quitar la idea de la cabeza. Hace cuatro años ya lo hicieron Luna y Verónica Hidalgo. Y sin picadero oficial.

Aparte del rayo inagotable de Toni, la pareja auténtica formada por Sonia y Carolina y la postiza relación forzada entre Tatiana y Arturo, hay alguna otra cosa que me ha llamado la atención en estos últimos días. De ayer la prohibición de las excursiones, que deja confinados a los concursantes en Playa Uva hasta nuevo aviso. Y de días anteriores dos flecos que cuelgan desde ayer, como decía la prensa tradicional "por exceso de material". Ambos corresponden a secuencias inéditas ofrecidas en el debate o la última hora del lunes. A veces esas imágenes son providenciales además de inéditas.

¿Quién dijo que Toni se había inventado el empujón de Alberto volviendo de una prueba de recompensa? No me extraña que este rubio concursante haya perdido bastante credibilidad dado su natural espíritu liante y follonero, ahora bien los precedentes en este caso jugaban en contra de la acémila violenta para el que la organización hubo de sacar un pasaje de vuelta el pasado jueves. Las imágenes nunca antes vistas mostraban como efectivamente Toni recibió un empujón, tal como había reclamado.

La actitud violenta y agresiva del empujador ya fue acreditada en otros lances mucho peores. Ahora bien, choca bastante recordar como Arturo niega que Toni haya sido empujado, utilizando para él ese tono chulesco y descalificador que le estamos viendo de forma permanente. De nuevo el del delfín se cubre de mierda al convertirse en cómplice de una actitud violenta, además de una mentira. El expulsado y él parecen especialmente dados a tratar mal a mujeres y viejos.

La otra secuencia inédita corresponde a la palapa en el momento previo a las nominaciones. Los 'Alfas' habían previsto nominar a Alberto, tanto si ganaba el collar de líder Jessica como si lo hacía Sonia. La situación ideal para ellos era la primera, puesto que en ese caso decidían los dos nominados de la semana, por un lado la acémila y del otro uno de los 'Betas'. Creo que habrían elegido a Sonia o Toni, aunque posiblemente manejasen la intuición de que era una nominación baldía puesto que pudiendo expulsar la audiencia a Alberto no iba a decantarse en ningún caso por ningún otro concursante.

Por esa misma razón no les preocupaba que los dos nominados cayeran de su lado, como hubiera sucedido de no producirse la expulsión disciplinaria y con Sonia como líder. En ese caso el grupo hubiera nominado al expulsado pudiendo Sonia elegir a cualquier otro, a buen seguro también hubiera sido Arturo su nominado. El caso es que la expulsión les pilló con el paso cambiado y a contrapié, por lo que hubieron de variar sus planes de forma precipitada.

Podíamos creer o no a Sonia cuando contaba en confesión a cámara que Rosa había marcado al grupo a quien debían nominar en lugar del expulsado. Pero las imágenes no mienten, y efectivamente vimos como llegado el momento es Rosa quien da la consigna de nominar a Carolina. Seguramente ella dirá que no obligó a nadie y solamente había dado su opinión, en lo cual tendría razón. Lo realmente curioso no es tanto que ella de consignas sino que los demás la sigan.

En cuanto a la prohibición mencionada, el grupo se la encontró en uno de esos pergaminos que la organización utiliza a veces para comunicarse con los concursantes. En ese escrito decía que por el momento quedaban prohibidas las excursiones, debiendo todos permanecer en Playa Uva por el momento. ¿A qué se debe esta decisión?

No hubiera estado de más explicar alguna razón que justifique tal medida. Más que nada para evitarnos esta intriga. ¿Tal vez estaban comiendo demasiado? ¿O quizá el espíritu depredador de nuestros náufragos estaba diezmando aquella costa? ¿Quiere la organización que Sonia finalmente mate a la iguana Juanito? Se me ocurre alguna razón más sólida pero tampoco estoy seguro de que tenga relación con esta decisión. Creo que las cámaras no siguen completamente el recorrido de los concursantes cuando van de expedición, por lo cual puede que el programa entienda que se les están escapando un poco.

También es posible que nos tengan preparada alguna sorpresa relativa a dichas excursiones, y no la vayamos a conocer hasta mañana jueves. Me viene a la memoria ahora aquella edición en que una bella modelo no hacía más que engordar mientras los demás pedían peso visiblemente, para terminar descubriendo que estaba consiguiendo comida de algunos habitantes de la zona con quienes se cruzaba en la isla cuando las cámaras no estaban. La leyenda negra siempre anduvo entre especulaciones sobre qué daría la concursante a los garífunas a cambio de la comida, pero mejor no entrar en tan pantanoso tema.

Por mi parte no paro de darle vueltas a algo dicho por Raquel en su despedida del pasado lunes. "Todo va a cambiar" este jueves, adelantaba la presentadora. Esto hace a mi mente volar imaginando posibles salidas a esta historia. Algo me dice que podrían cambiar de isla puesto que llevan bastante tiempo en Playa Uva, aunque tal vez no sea esto lo que cambie. En todo caso, y volviendo al asunto de la prohibición, les están quitando una fuente importante de su alimentación.

Pensemos que no pescan porque se han quedado casi sin aparejos para hacerlo. Solo les queda un anzuelo y de los grandes, por lo cual no pueden pescar. De las excursiones traían cangrejos, lapas y algunas veces cocos. Ahora solo les quedan las almendras, que esa playa tiene por miles y crean adición, según decía ayer Jessica (en su única frase de los últimos quince o veinte días). Si quieren evitar que se busquen comida fuera de la playa deberían proporcionarles un nuevo kit de pesca. O eso o pronto tendrán un bonito ramillete de concursantes a punto de perecer por inanición.

Volviendo a Toni, de todas sus cosas la que más gracia me hace es su defensa de Juanito. No tanto por estar defendiendo a un animal como por las razones dadas para ello. Resulta que le bautizó Juanito porque le recuerda a un amigo suyo de Madrid. A lo que añade: "Anda así igualito que él", mientras mueve la mano describiendo el movimiento de una culebra. Así que Toni está defendiendo la vida de la iguana porque culebrea como un amigo suyo, mientras Sonia se muere de hambre y sospecha que no hay un solo Juanito. Es más, ella ve Juanitos andando como pollos casi entre sueños. El pobre Juanito, el de verdad, debe estar alucinando sumido en la duda sobre si anda como un pollo o como una iguana.

De la indisposición que sufrió Sonia tras ingerir un cuenco entero con el agua de cocer las almendras casi prefiero no decir mucho o algunos me estarán en seguida acusando de estarle retirando el apoyo a esta concursante, llamada ahora por Toni como la "hemonrroydes'". Dice que tiene el estómago sensible a los ácidos y se bebe ese brebaje con pinta de agua sucia. ¿Pero dónde tiene la cabeza? Normal que luego vomite y se ponga a parir, en sentido figurado.

El episodio de la indisposición de Sonia me va a ayudar a que termine el escrito de hoy con dos detalles que me gustaron de la tira diaria de ayer. Uno fue la actitud de Rosa y su predisposición a ayudar a la enferma. Al igual que esta creo que lo hizo porque le salió de dentro, totalmente en su papel de madre. No creo que buscase quedar bien ante las cámaras aunque le sobró que ella misma lo dijera en confesión a cámara. Ya se sabe que "excusatio non petita accusatio manifesta". En todo caso, bien por Rosa.

Y la otra estampa que me enterneció ayer fue ver a Carolina de bajón y necesitada de cariño. No solo porque veo sincera su relación con Sonia y me gusta, sino especialmente por una cosa que decía la de Linares y creo que es muestra clara de su buen corazón. Resulta que está de bajón y no tiene claro si desea seguir o prefiere volver a casa, pero tiene mala conciencia con ello porque piensa que al irse estaría dejando a Sonia en la estacada. "Yo me quiero quedar contigo porque te quiero ayudar, pero es que no me veo fuerte ya", decía Carolina. Tanto me gustó este sentimiento como la buena respuesta de su compañera: "Tú te tienes que quedar porque tú quieras quedarte. A mí no me hace falta que me ayudes". ¡Ays! (suspiro).

Dejo caricatura del delfín. Bueno, los delfines. El de la izquierda concursa en Supervivientes. Genial Javier B.V, como siempre.