VOTA EN NUESTRA ENCUESTA: ¿ES ISABEL PANTOJA "UNA SEÑORA" TAL Y COMO ELLA MISMA ASEGURA?"
(telecinco.es) Isabel Pantoja se ha puesto las pieles y el moño para cobrar en la portada del Hola para anunciar en la portada que deja a Julián Muñoz. Por supuesto, toda España sabía que la pareja había roto, pero la tonadillera ha querido aparecer en la prensa para volver a contarlo. "Sí, he terminado definitivamente, puedo decir que ya no estoy con él", es uno de los titulares de la entrevista.
Muchos recordarán lo mal que lo pasó esta mujer por el acoso de la prensa, por proteger su vida privada y guardar sus asuntos para sí. Ahora en cambio, al tratarse de un tema de interés general –su ruptura con uno de los implicados en la mayor trama de corrupción que ha conocido España- la Pantoja ha decidido hacer caja confesarse. Ahí va otra perla: "He ido perdonando cosas, situaciones, tratando de quitarles importancia. Luego se desbordó todo en el mes de julio cuando Julián fue detenido".
Lo más sobresaliente de esta noticia es el juicio que la Pantoja hace del ex alcalde de Marbella: “Julián cometió el error más grande que ha podido cometer conmigo: el de no ser sincero, el mentirme”. Desde luego, la tonadillera se ha pasado de vueltas. Confesar que el error más grande de el Muñoz -un señor que tiene abierto un centenar de procedimientos penales en España– ha sido decirle mentirijillas a ella, su chorva podría ser tachado de políticamente incorrecto y hasta de inmoral. Recomendamos desde aquí a la Panto que se vea las dos temporadas íntegras de Sin tetas no hay paraíso. Así podrá aprender de Catalina como debe comportarse la novia de un señor al margen de la ley, sea este un narco, un político corrupto o un simple ladrón.
Catalina debería ser un ejemplo para ella: se enamoró de un narco y mantuvo a salvo su moral y su ética. La Panto podría aprender del espíritu redentor de Catalina. Si tu novio vive fuera de la ley tu responsabilidad civil es reconducirlo o abandonarlo. O sea, que si tienes un churri como el Duque que mata gente por las noches, pues no puedes decir en público cosas como que se mantuvo a su lado más tiempo del necesario porque "Era como dejar a una persona desvalida, sola... y no pude dejarle. Lo mío era estar ahí como una señora, que es lo que soy".
Dejando a un lado el hecho de que no es bueno pasearse por ahí asegurando que una es una señora –halago que es mejor que hagan los demás que pregonarlo una misma-, lo cierto es que no cuela que Julián Muñoz es un ser desvalido. En realidad es un alcalde que ha estado en la cárcel por estafar a la ciudadanía. O sea, no es Bambi, es la madrastra de Blancanieves.
Vale que el photoshop le haya dejado a Isabel la cara nacarada, pero lo que todavía no pueden hacer las revistas del corazón es cambiar el rumbo de la historia. Si así fuera, pediríamos que resucitasen al Duque, pero claro, cierto tipo de cosas no pueden ser (y además son imposibles). Esta entrevista adolescente de confesiones quinceañeras: “Lo he querido con locura. Pero, por mucho que él lo haya dicho, no llegué a sentir que me quería con él", no es propia de una señora persona con derecho a voto. Los sentimientos amorosos hacia un hombre que ha traicionado a la democracia española es mejor no airearlos. Isabel, esa es exactamente la línea que debe separar la intimidad del talonario: el respeto cívico. Tanto te quejaste de periodistas del corazón cuando el tema era el corazón y ahora que el tema son los juzgados te atreves a marcarte este ‘revival’ de ‘love in La Pera’. En fin, no ha sido buena idea. Mucho mejor sanear tus cuentas con el hombre más valioso de tu vida (y de la España del corazón, que es la tuya): el gran Kiko Rivera.
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