La dolorosa

telecinco.es 14/11/2008 08:34

Quiero volver al personaje de Loli, la 'dolorosa' de la casa de , una concursante extremadamente pendiente de la imagen que puede proyectar, temerosa de las consecuencias que pueden conllevar cada uno de sus actos, y calculadora. Me perdonará el lector que me auto cite, pero este gato escribía esto hace unos días:

Luego hacía un repaso de su poco leal actitud con Gisela, e incluso con Carlos, sus contradictorios problemas con la salud, o su compulsivo proceder en la mesa. Dado lo delicado de algunos de estos temas, prefiero no incidir en ellos, por el contrario, me gustaría volver a hacer el intento de analizar cómo se encuentra en estos momentos ese singular trío en el que se ha visto envuelta (con Carlos y Gisela) y, principalmente, reflexionar sobre su extremo celo ante la posibilidad de hacer algo que la perjudique, lo cual la lleva a medir sus pasos mucho más de lo que sería deseable.

Durante esta semana que culminará con una nueva expulsión, y estando Carlos 'hacha' nominado, he podido leer en ocasiones el argumento de que este concursante no debe abandonar la casa porque dejaría pendiente la resolución de ese trío fruto de su propia confusión a la hora de decidirse por una de las dos mujeres que todos conocemos. No estoy de acuerdo con esto, ya que ese trío ha sido desactivado por su propia torpeza a la hora de tratar a ambas, gestionando el tema como si fuera un inexperto adolescente que juega a ser mayor. Movió ficha en su y se ahorcó él mismo, desactivando desde ese momento todo el interés que la situación podía suscitar. O es que, ¿no está claro que si hubiera jugado con su indefinición en el 'confe' podría haber rentabilizado la situación mucho más? No me cabe duda de que es así, y puede que nos conquistase haciendo que nos compadeciéramos de un hombre , seducido por los encantos de dos mujeres a la vez.

Pero ese juego ha terminado, aunque él mismo no se diera cuenta hasta el pasado martes. Durante la velada de nominaciones, que pudo vivir de forma privilegiada viendo a sus compañeros en un monitor de televisión, aprovechó la compañía de Nany para obtener la mayor cantidad de información sobre Loli y sus posibles sentimientos hacia él. No lo hizo mal en esa ocasión, y obtuvo las claves que la propia interesada le tendría que haber dado. Esto pasó a pesar de que Nany se resistió mucho a soltar prenda, teniendo un exquisito cuidado en no traicionar a su amiga. Pero insisto en que fue listo y terminó obteniendo la información que precisaba, especialmente en ese momento clave que deja en suspenso el final de su frase, extendiendo los brazos y esperando que fuera la propia Nany la que dijese "que no". Inteligente recurso el de Carlos, que estaba diciendo una frase como esta: "O sea, que tú tienes la seguridad, por lo que sabes de los sentimientos de Loli, de que la respuesta es que...", el 'no' estaba casi implícito, pero por si había alguna duda salió de la boca de ella con gran contundencia.

Por tanto, fue Nany la que desactivó realmente todo el interés que este trío podría suscitar, e incluso se me antoja más interesante la situación de ambas sin este 'soylapera', ante la posibilidad de que terminen en un juego de reproches de cierto interés. Pero el caso es que ya sabemos que no hay posibilidad ninguna de ver a Loli acercándose a Carlos, aunque este continuara en la casa. Y esto es así porque un paso como ese no sería nunca dado por una de las concursantes más condicionadas por el miedo a cometer algún tipo de error. Su actitud habitual no es nada comprometida, asistiendo normalmente a las conversaciones sin ni siquiera asentir para no pecar, con un grado de empatía que tiende a nulo.

En el diario de ayer pudimos ver una secuencia perfectamente hilada en la que se mostraba esto que digo de forma prodigiosa. Loli está hablando con Nany y esta le expresa las dudas que tiene sobre Liz, a la que lamenta no haber nominado. Le oculta la información de que sus dudas definitivas le vienen por algo que le ha contado Carlos minutos antes, y es aquello que la dominicana le dice de que Loli sí está interesada en él, un invento más de esta concursante lianta y follonera. Loli asiente en esta ocasión, llegando a decir que ella también desconfía. En medio de esta misma conversación Loli parece percibir que se está comprometiendo más de lo que debiera, y recula: "Yo te digo que me verás hablar con ella muchas veces, pero es porque hablo con todo el mundo, y eso". Mi interpretación es que tiene miedo de que parezca una contradicción que ella interactúe con Liz y al tiempo esté ahora expresando sus dudas sobre ella, al darle la razón a Nany. Este es el primer renuncio pero no el único de la noche. Minutos después va al 'confe' y tiene especial interés en aclarar que su desconfianza hacia Liz no quiere decir que no vaya a seguir hablando con ella igual que con los demás. Dice algo así, aunque esto es lo de menos, lo destacable es su interés por disculpar de nuevo su actitud.

No sería el último renuncio de la noche este que cuento, ya que entre medias de las dos escenas narradas sucede la breve discusión con Carlos, que media en la conversación de ambas provocando una reacción algo airada en Loli. Cierto que ella vuelve a recular cuando se da cuenta de lo desproporcionado de su respuesta, sonriendo y diciendo falsamente que estaba de broma. Su propia imagen dando un corte de mangas a Ana Toro la vuelve a asaltar como una pesadilla y por eso recula de nuevo, se excusa y da nuevas muestras de hasta qué punto está condicionada, como digo, por la imagen que pueda proyectar al exterior.

¿Por qué digo que Loli mide sus pasos más de lo que sería deseable? Pues muy sencillo, porque esto determina que esta concursante sea quizá la menos natural de cuantos hemos conocido. Si reclamamos naturalidad en ella no la encontraremos, sino más bien al contrario, se trata de un personaje diseñado con el fin de conseguir un buen resultado. Por eso no hubiera querido que ningún chico se fijara en ella, por eso lo primero que le preocupa tras la noche en la que Carlos se la juega y admite que le gusta, su única preocupación, es que la audiencia la pueda sancionar por darle calabazas, por eso no termina de dejarle las cosas claras temiendo dar un paso que pueda no ayudarla. Es decir, mide sus pasos de forma milimétrica, lo cual le resta naturalidad.

No voy a poner en duda sus razones para permanecer tanto tiempo en la cama, aduciendo un padecimiento u otro. Solo pondré en claro que a saber, Loli ha pedido que le dieran un masaje porque le dolía la espalda, tiene un desarreglo intestinal (o algo semejante) y seguramente haya aducido alguna otra cosa para justificar este hecho. Claro, siendo malpensados también podemos opinar que quizá decida meterse en la cama para un poco más, apartándose de la circulación durante unas horas. Quizá tenga la convicción de que mientras duerme o medita en posición horizontal, no se puede equivocar, o al menos no se notará si lo hace.

Las tres últimas noches he visto a una Loli que o bien duerme desde bien temprano, o bien llora delante del viudín Carlitos, supuestamente preocupada por su negocio y cómo lo estarán gestionando las personas que puso a su frente durante estos meses. Solamente ha faltado que en lugar de interesarse un chico por ella, sin que le diera 'cuartelillo', hubiera sucedido al contrario, no encontrando consuelo al rechazo de un chico al que ama. La Dolores 'dolorosa' hubiera completado a la perfección esa estampa tan cuidadosamente compuesta, trazo a trazo y gesto a gesto.

Y termino por hoy con un par de apuntes. Primero que me gusta ver a la fantástica pareja que forman Orlando e Iván liados en la cocina, ocupando el lugar que les deja Mirentxu. Me da la sensación de que la donostiarra les deja el sitio gustosamente, y esto servirá para desactivar las falsas excusas que siempre han dado algunos sobre si trabajan o no, aportan más o menos. Ahora les veo muchas veces a ellos cocinar y repartir la comida, lo cual me alegra. También es cierto que la abuela ha delegado un poco justamente cuando no hay mucha comida, es decir, cuando se hace más difícil sacar adelante esa labor.

Lo otro es una conversación que mantuvieron anoche en el entre Iván, Orlando y Nany sobre las nominaciones. El modelo ya sabe que esta le metió los tres puntazos, e incluso que en la anterior nominación también le incluyó en su terna. Mientras que el feriante se duele por la nominación de Julito, la tesis de los otros dos contertulios es que esto no debe influir en la relación que mantienen con los demás, al tratarse de un juego en el que nominar es una obligación. Sin embargo, la de Seseña no termina de entender el buen rollo con el que Iván le dice que le siga nominando, que no le importa. En apenas diez minutos Iván desmontó la inconsistencia de los argumentos de una Nany cada vez más incómoda con la situación. Y todo con la más amable de las formas, mirándola a la cara y entre sonrisas. ¿Es o no un fenómeno este Iván? ¿Sí o no? Eh ¿Sí o no? (homenaje a Germán).