Se dice pronto: conducir. Algo que debería ser tan sencillo, tan natural y que se ha convertido por desgracia en la aventura a la que miles de ciudadanos se enfrentan cada día. Así que como uno es observador y por las mañanas “alucina” con la actitud de algunos de sus congéneres voy a tratar de resumiros el tipo de conductor habitual y sus fases de actividad más peligrosas.
Conductor Mañanero: Va rumbo al trabajo con la legaña pegada al ojo. Se duerme en las rotondas, cambia de carril sin poner los intermitentes y suele llevar en la radio del coche algún debate sesudo que le impide centrarse en la conducción. Cuando provoca el accidente siempre responde con un, “no me he dado cuenta porque a estas horas todos vamos un poco dormidos…..”. Claro: tendría que estar durmiendo y no conduciendo. Tipo de accidente: colisión por alcance al no ver un frenazo brusco en la M30,40 0 50.
Mamas al Volante: Tiene prisa por dejar a los niños en el cole para a continuación ir a tomar café con las amigas. Temerarias e irreflexivas. En las zonas residenciales del noroeste de Madrid suelen ir sin cinturón y con los niños mal colocados en las sillas infantiles. Eso si cuando bajan del coche el aroma a perfume de marca esta garantizado. Tipo de golpe: no respetar ceda el paso en rotonda situada al lado del colegio. Excusa: “yo tenía la prioridad”. No se percata de que el coche golpeado estaba en mitad de la rotonda.
Repartidor Enfadado: Vehículo de reparto tamaño medio. Entra a saco por cualquier calle, incluso en dirección prohibida. Tiende a la agresividad y cuando deja el camión en doble fila y escucha el “claxon” de otros vehículos responde malhumorado:” estoy trabajando”. Vamos que los demás estamos paseando por la calle a las 10 de la mañana. Tipo de accidente: colisión con coches aparcados, maniobras prohibidas.
Motero Ansioso: suele ir disfrazado de Mad Max. No respeta nada ni a nadie. Cambia de carril a voluntad y que frenen los demás. Cuando alguien se lo lleva por delante por invadir un carril sin señalizar la maniobra siempre dice lo mismo: “es que no me has visto”. Tipo de accidente: arroyado al cambiar de carril, o golpeado cuando se salta un semáforo para ganar 1 segundo en una repartida de material.
Transportista Público. O dicho de otra manera: Taxista. Horas y horas de trabajo producen una especie de aletargamiento propio de otras especies. Es inmune a todo y campa por sus respetos. Si tiene que pararse lo hará sin problemas aunque forme una cola de 300 metros. Y si tiene que girar o cambiar de carril no habrá barrera que se lo impida. Tipo de Accidente: choque con otros vehículos. Excusa: “ustedes no saben conducir”.
Ciclistas Deportivos. Van solos o en pareja. Si conocen la ley la respetan, pero sino ejercen una especie de dictadura sobre el conductor de coches o motos. Su maniobra favorita en no parar en las rotondas para aprovechar la inercia y no sacar los pies de los pedales. Peligrosos sino llevan la indumentaria reflectante necesaria.
Ciclistas urbanos. El terror de las aceras y los pasos de peatones. A medio camino entre el repartidor ansioso y el repartidor enfadado. Si se te ocurre decirles algo o te insultan o te amenazan. Cada vez hay más. Tipo de accidente: caída por colisión con peatón en la acera.
Poligonero. Coche llamativo. Música Pumba, pumba, pumba. Suele ir “hasta arriba” de todo. Un peligro, porque no controla y se salta cualquier tipo de limitación. Los accidentes de este tipo de conductores son graves y tienen lugar en su mayoría en el entorno de la madrugada del fin de semana. Mucho ojo con ellos.
El Conductor Normal. Aparentemente es un ciudadano normal, padre de familia, con un trabajo estable y un coche de nivel medio alto. Una personalidad que se altera al volante donde se vuelve agresivo, insulta con facilidad, se baja del coche al mínimo incidente y es capaz de poner denuncias falsas. Tipo de accidente: colisión en atasco
Conductor inconsciente: Conduce por que no le queda más remedio. Vago hasta la saciedad no pone los intermitentes, deja el coche en doble fila, no pone el ticket de la hora, no paga impuestos y no pasa ITV. Su coche suele caerse a trozos. Un peligro sobre ruedas porque no sólo no es consciente del peligro que representa para si mismo, sino que ignora deliberadamente el riesgo que supone para los demás. Tipo de accidente: todos.
Podría seguir hasta la saciedad, pero quiero dejaros la puerta abierta para construir la “Guia oficial de los tipos Conductor Español”, porque la verdad es que hay tanto tipos como estrellas. Así que ánimo y a ver con qué me sorprendéis.