La selección de Luiz Felipe Scolari ha jugado dos partidos previos de preparación a la Copa Confederaciones, un empate, ante Inglaterra (2-2), y una victoria, ante Francia por 3-0. Brasil mostró una evolución entre los dos partidos y parece que ha engrasado la maquinaria para llegar en perfecto estado a la Confederaciones.
Aunque el verdadero objetivo de Brasil no está en este torneo. Su mira está puesta más allá, en el Mundial del año que viene, como ha reconocido su seleccionador en los días previos. "El equipo se está montando. Una vez leí en una revista que la naturaleza no da saltos. Tenemos que ir trabajando, para tener un equipo competitivo y ganar partidos", afirmó Scolari.
El último encuentro entre ambas selecciones fue el pasado mes de octubre del año pasado, en el que Brasil goleó en Polonia a Japón por 4-0, con doblete de Neymar, uno de Paylinho y otro de Kaká. En cuanto a los encuentros oficiales, los japoneses nunca han conseguido ganar a Brasil, de nueve choques, en siete hubo victoria brasileña y en dos empataros.
Japón, que fue la primera clasificada para el Mundial de 2014, llega con moral y con ganas de probarse ante rivales más potentes. Su grupo es el más difícil con Italia, México y el rival de este sábado, Brasil. En el billete obtenido para el Mundial venció cinco de sus ocho partidos y afronta la cita de este verano como un examen para conocer el nivel al que están realmente.
Y así lo hizo saber el seleccionador japonés, Alberto Zaccheroni, antes de medir sus fuerzas con las de Brasil. "La Copa Confederaciones será difícil, pero es lo que queremos. En el torneo solamente hay equipos de calidad, por eso debemos emplearlo como un pilar para asentar las bases de 2014", apuntó el técnico italiano.
Los números hablan a favor de la selección de Scolari pero los japoneses tienen las ganas de estar en un gran torneo internacional y comprobar sus fuerzas reales. Brasil y Japón están listas para empezar la Copa Confederaciones. Sólo falta que llegue el sábado a las 21.00 horas.