"Tú estás haciendo caso a la policía y tu marido va a morir." Ese es el terrorífico mensaje que el secuestrador de Abel le da a su mujer. "Es la última oportunidad que tienes si quieres verlo con vida. La próxima vez te voy a mandar un pedazo de tu marido", le dice el secuestrador, que aprendió esta forma de actuar en Argentina donde se refugió durante 20 años tras un homicidio.