Todo Huelva está llorando. Es Mari Luz Cortés. El padre de la pequeña y las pruebas de ADN ratificaban la noticia: el cadáver hallado flotando en aguas de Huelva pertenecía a la pequeña desaparecida el pasado 13 de enero. La pesadilla terminaba, pero esta vez, sin un final feliz.
La pequeña de cinco años, cuyo cuerpo fue encontrado en el muelle petrolero del Puerto de Huelva después de 58 días desaparecida será enterrada en Huelva. Durante todo este tiempo toda la familia mantuvo la esperanza de encontrar con vida a Mari Luz. Si embargo, un operario de Cepsa avistó un cuerpo en la zona de los petroleros. Horas después, el padre identificó el cadáver de su hija, confirmado posteriormente por las pruebas de ADN.
Los padres han encargado una segundaautopsia, se investiga si pudo caerse a un colector cercano de su casa y luego ser arrastrada por las mareas. Los forenses descartan la violación. Lo que si es seguro es que el cadáver pasó por el caño del rincón porque no había heridas de cangrejos.
La Investigación
La policía se centra en precisar la hora de la muerte de Mari Luz para avanzar en el conocimiento de la causa del fallecimiento; considera que murió entre las 24 y las 48 horas posteriores a su desaparición. Los forenses descartan la violación, sin embargo, Mari Luz presenta dos golpes, uno leve en el cráneo y otro en el costado ante-morten.
La desaparición de Mari Luz
La pequeña salió de su casa con un euro en la mano para comprar una bolsa de patatas a una tienda que hay al lado de su portal. Desde entonces no volvió a aparecer. La familia denunció su desaparición dos horas y media después, una vez que amigos y familiares buscaron por toda la zona. El padre de la pequeña, Juan José Cortés, pidió desesperadamente pedido que la devolvieran. No sirvió de nada. Ahora, hay que determinar la causas de la muerte.