Horas después de su salida de prisión, José Ortega Cano llegaba a su casa de Fuente del Fresno y se reencontraba con su familia. "Se echa mucho en falta a los tuyos. Ya estoy aquí y hay que disfrutarlo", decía el diestro a su llegada al domicilio familiar, donde reconocía que con su paso por la cárcel le ha cambiado. "Vengo limpio mentalmente y de corazón."