La reforma del Tribunal Constitucional propuesta por el PP tres semanas antes de las elecciones catalanas ha unido a la oposición. Todos los grupos parlamentarios la consideran injustificada y están preparando un recurso conjunto para intentar frenar su tramitación en e Congreso. "Me parece inadecuada vinculada a un suceso político con nombre y apellido", ha dicho Manuela Carmena.