Destrozan una masía en una fiesta ilegal con 300 personas: "Ha habido un consumo excesivo de drogas y me amenazaron"
Los Mossos ya han detenido a una personas responsable de la macro fiesta en la masía
"Viendo lo que hay en la casa, aquí ha habido un consumo de drogas excesivo"
La dueña recibió amenazas por parte de las personas que querían entrar a la fiesta mientras ella intentaba desalojar el lugar.
Los detalles sobre la macro fiesta ilegal que deja destrozada una masía alquilada en 'El programa de Ana Rosa'. La casa tenía numerosos daños y estaba llena de latas y botellas de alcohol. Se había alquilado a 10 personas para hacer turismo rural. Ya hay un detenido por el delito en la masía de Mont-ras (Girona), donde más de 300 personas estuvieron de fiesta sin respetar las medidas de prevención contra la pandemia durante horas.
La dueña declara que la casa se había alquilado a una familia que iba a pasar las vacaciones y hacer turismo, pero "resulta que se hizo para una fiesta en la que se cobraba una entrada y se alquilaban las habitaciones". Maite, la dueña, fue la que avisó a los Mossos tras recibir una llamada anónima alertándola de la situación. Pero no pudieron desalojarla hasta por las nueve de la mañana.
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La dueña, que vivía a poca distancia de la masía, salió de su casa al ver llegar una gran cantidad de vehículos: "Había salido porque escuchaba mucho ruido y vi que había demasiada gente". Más adelante, la mujer recibió una llamada desde un número privado: "Se identificaron como los Mossos d'esquadra, me dijeron que había una fiesta ilegal en la finca y que fuera a desalojarla".
En el evento se pagaba por consumición y se vendieron todo tipo de drogas. La dueña muestra cómo se encontraron la casa, con antorchas y los muebles apartados para hacer una pista de baile. Además, cuenta que "le mandó la noticia a la persona que les contrató la casa pero no le ha contestado". La mujer comenta que tiene que "valorar todos los daños y hacer una denuncia". Además, la propietaria añade: "Viendo lo que hay en la casa, aquí ha habido un consumo de drogas excesivo".
En la fiesta se encontraban también personas que la mujer conocía como amigos de su hija que incluso agredieron a la propietaria cuando intentó desalojar la casa: "Cerramos cancela de hierro de la entrada pero seguía entrando gente saltándolas". La mujer continúa: "Uno me explicaba que había hecho 150 kilómetros de viaje para ir a la fiesta y que pasaba sí o sí". Además, el individuo en cuestión amenazó a Maite: "Que si tenía que partirme la cara me la partía".