Han pasado más de tres meses desde el crimen que puso fin a la vida de Esther. Ese 26 de febrero, la víctima y su presunto asesino habían quedado, pero todo acabó con un tiroteo.
Según las hermanas de la víctima, Antonio ya había amenazado de muerte a Esther: "Él se obsesionó con mi hermana y la acosaba. Alguna vez llegó a amenazarla porque no quería estar con él". Incluso, en alguna llegó a enseñarles las pistolas que decía haber comprado y llegó a ir a la la tienda de la hermana de la víctima.
Se desconoce qué pudo pasar y de qué hablaron. Lo que sí se sabe, es lo que ocurrió después. Inmediatamente después de los disparos, las autoridades se trasladaron al lugar del suceso. Aunque las hermanas de Esther señalaron a Antonio desde el primer momento, los agentes no dieron con él. Tres días después, él mismo se entrega y se declara autor de este asesinato.
'El Programa de Ana Rosa' ha tenido acceso a información de lo que ocurrió las semanas previas al crimen de 'Ciudad Lineal'. El entorno de la víctima conocía perfectamente la presencia e insistencia de Antonio: "Nos hizo partícipes de que este hombre la amenazaba, incluso llegó a ponerle un dispositivo de seguimiento para tenerla controlada y vigilada", cuenta en su declaración la hermana de Esther.