Iván y su equipo tomaron a Lorena como objetivo de bromas: "le grito a alguien para que me ayude a cumplir la primera misión: arruinar la vida de Lorena". Aparecían detrás de una puerta, le preparaban una pequeña trampa en sus zapatillas… "Puede que un día me canse de las bromas", decía Lorena y, finalmente, se hartó.
El concursante intentaba quitarle hierro al asunto: "A mí me daría pena que te fueras, a ver a quién le hago putadas", bromeaba y, más tarde, Lorena lloraba en el confesionario: "estoy saturada de las bromas…"
Las bromas derivaron en enfado. Le quitaron su maletín y Lorena le dio un ultimátum a Iván: "Si no tengo en cinco minutos mi maletín…", le advertía. Ya en el confesionario, Iván decía estar cansado de sus contestaciones: "no me gusta, malmete mucho y eso no me gusta" y Lorena hacía lo propio, en este caso, Iván le genera "ansiedad".
Y la tensión estalló. Iván acudía a la habitación donde estaban Noe, Lorena y Argi. El enfado continuaba, Iván se dirigía a ella, le tocaba y Lorena le advertía: "A mí no me toques, te lo advierto, que no me toques" e hizo un amago con la mano que Iván esquivó: "Espero que España vea esto (...) Cada uno tiene lo que se merece".
Ambos continuaban con la discusión, pero en habitaciones separadas: "Me ha intentado pegar la Lore", decía Iván; "Quiero que le digas a tu amigo que ni me toque, ni me despierte, ni me hable", decía Lore. Juan Carlos aconsejaba a Iván que ni se dirigiera a ella, Lorena se mostraba decidida a nominar a Iván pero se mostraba cabreada porque cree que su rival está manipulando a Noe y Juan Carlos, sus principales aliados.
Iván continuaba en el confesionario: "Si a una chica le hago así [imita el gesto de Lorena] que es, espero que hagáis lo correcto pero estas cosas no se pueden permitir en televisión".
Mercedes Milá le daba la réplica en directo en plató: "lo que no se puede permitir es utilizar una situación, agrandarla para dañar a otro concursante". A la presentadora no le gusta que se hable en estos términos: "es tan grave que un concursante agreda a otro que no me gusta que los demás nos digan lo que tenemos que hacer cuando no hay nada que hacer".
Noe contaba a Lorena, a solas, lo que Miriam había dicho de ella y Lorena decidió plantarle cara: “Noe me ha contado lo que hablas de mí”, decía Lorena y Miriam le explicaba lo que no entiende de ella: “son tus preguntas, no lo entiendo, se lo dije a Noe pero te lo puedo decir a ti”. Finalmente, Miriam acababa entre lágrimas, no es capaz de entenderse con Lorena y esa situación le agobiaba.