Cuando Belén Roca se disponía a dormir, una ventosidad que le propinó Sema a menos de un metro, desencadenó una nueva polémica en Guadalix. De un lado Sema, que defendía su acción como una simple broma, y Julián, que todo le pareció de lo más gracioso porque no se lo hicieron a él. y por otor lado Belén, la afectada por el gas y Rappel, que aseguró estar harto de las bormas de mal gusto de Sema.