En Barcelona, un grupo de Menores Extranjeros No Acompañados (MENAS) ha vuelto a sembrar el pánico entre los vecinos de un bloque de viviendas al okupar por la fuerza y a plena luz del día un piso.

Los vecinos han tratado de evitar la okupación, a lo que los menas han respondido con una extrema violencia: con golpes y cinturones. Los habitantes del inmueble están viviendo una pesadilla. “Llevamos dos noches sin dormir por los follones que montan”, expresa uno de ellos.

A los menas poco parece importarles la presencia de vecinos o de la Guardia Urbana. De hecho, se pasean delante de ellos con un colchón que meten en el piso por la noche y, por el día, lo lanzan por la ventana junto a ropa y otros objetos.

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