A los españoles les cuesta reconocer el dinero que se gastan en móviles

Casi un 40% de los españoles asegura sentirse desasosegado si su móvil deja de funcionar, un 65% siente angustia si pierde el 'smartphone' y un 72% afirma que viviría con bastante o mucha ansiedad un robo de su dispositivo móvil, según un estudio realizado por IPSOS para la empresa de en seguros para telefonía móvil, multimedia y objetos conectados SFAM.

El estudio, presentado en el marco del MWC de Barcelona, incide en que este tipo de dispositivos suelen almacenar archivos e información privada de sus propietarios, lo que hace que casi el 50% equipare la pérdida del móvil con la de su propia privacidad; un 46% lo compara con perder una extensión de su memoria; y un 30% con la pérdida de algo tan valioso como las llaves de casa.

"Queremos conocer la percepción y las necesidades de los consumidores españoles para proponerles soluciones adaptadas. SFAM está presente en España desde 2016 a través de nuestros socios distribuidores y nuestro crecimiento exponencial en este mercado nos ha demostrado la necesidad de los españoles de proteger sus teléfonos inteligentes", señala Sadri Fegaier, fundador y CEO de SFAM.

Los teléfonos y otros dispositivos móviles como ordenadores o tablets forman parte de la rutina personal y profesional de los españoles. El 42%, invierte entre 200 y 500 euros en la compra del teléfono móvil y el 23% destina más de 500 euros. En la compra de otros dispositivos tecnológicos como ordenadores, tablets, weareables o drones el presupuesto para un 28% de los individuos oscila entre 1.000 y 3.000 euros.

Los españoles dedican, por tanto, un presupuesto significativo, paralelo al rol que los móviles desempeñan en su vida: el 55% considera el smartphone como una herramienta esencial en su vida personal y profesional y un 43% lo califica de importante. Según los resultados del estudio, casi el 25% pasa más de 4 horas diarias frente a la pantalla del móvil y un 33% entre 2 y 4 horas.

En cuanto al uso que se da al teléfono móvil: llamar, para el 82%, y chatear, para el 76%, son las principales funciones que se dan al smartphone; un uso muy distinto al de los usuarios en Francia donde el acto de llamar, para un 87%, es muy superior al de chatear, que únicamente hace un 33%.

Por edades, el chat y las redes sociales son las funcionalidades más usadas entre los jóvenes de 18 y 29 años. Llamar y chatear son los usos preferidos entre los adultos entre 30 y 54 años. El móvil se convierte en un reproductor de música para el 65% de los más jóvenes, un uso superior al que le dan los adultos de entre 30 y 44 años (con un 46%) y mayores de 45 años (un 40%).

Otro dato interesante del informe apunta a que un 52% de los usuarios prefiere apurar la vida útil de su 'smartphone' (invirtiendo, en el caso de los españoles, hasta 200 euros en reparaciones) y sólo tres de cada diez decide cambiar por adquirir un modelo de categoría superior. En Francia el porcentaje se invierte y un 41% reemplaza su modelo por otro nuevo sin motivo aparente, mientras que un 36 lo hace por un fallo en el funcionamiento.

Casi la mitad de los españoles emplea el teléfono con un fin profesional, una cifra superior a la del 31% de los usuarios franceses. Entre los españoles se observa una tendencia de mayor uso profesional en los más jóvenes: un 50% de los menores de 30 años incorporan el móvil como una herramienta de trabajo frente al 45% de adultos mayores.

Pese a todo ello, sólo el 15% de los españoles asegura los móviles. Los más precavidos son los jóvenes de entre 18 y 29 años: hasta en un 26% de ellos deciden apostar por un seguro para multimedia frente al 12% de usuarios de mayor edad.

Por franjas de edad, los jóvenes de entre 18 y 29 años también son los que más presupuesto dedican a la compra de dispositivos móviles: el 24% invierte entre 500 y 1000 euros en la compra de su smartphone, frente al 19% de los otros grupos de edad.

Como cada año, especialmente durante ferias como el MWC, la industria móvil presenta nuevos modelos con funcionalidades innovadoras. Según este estudio, el 36% de usuarios españoles se decanta por un sistema de seguridad a prueba de hackers como elemento clave, seguido de un 25% que prefiere una cámara potente y un 20% que valora un sistema que le informe cada mañana sobre su estado salud.