El espacio que presentaba Julian Lago a principio de los años noventa no fue el único lugar donde Ramón Calderón se batió el cobre en defensa de los intereses de 'Paquirri' y su mujer, Isabel Pantoja. Antes, había sido su albacea testamentario y peleó junto a la tonadillera por los derechos de la emisión televisiva de las imágenes de la agonía y muerte del torero en la Plaza de Pozoblanco, en Córdoba.
Mucho se ha hablado después de la conexión de Ramón Calderón con el clan de los Pantoja. Hasta el punto de que el ex presidente tuvo que manifestar tras la Operación Malaya que él no tenía nada que ver con alguno de los casos que se habían denunciado.
En cualquier caso, la prueba más fehaciente de su vinculación a esta familia fue una información publicada por el diario El Mundo en la que se constataba un hecho genuinamente pintoresco: facilitó que Paquirrín realizara pruebas para fichar por el Real Madrid
"Su buena relación con Isabel Pantoja le llevó [a Calderón] a mediar años después para que Paquirrín realizara una prueba en el Real Madrid con el fin de lograr su fichaje por los equipos inferiores del club blanco".