Anne describe a Angel Nieto sénior como "una persona reservada y tranquila" que muchas veces no contaba a su familia todo lo que sentía por ellos. Desde el más allá quiso transmitirle a su hijo lo que pensaba de él con un mensaje breve pero lleno de emoción: "Estoy orgulloso de ti, hijo"
A través de la médium, el progenitor comentó que sintió un gran alivio al dejar este mundo, a lo 88 años de edad, dado que su cuerpo "ya no funcionaba". Como después confirmó Ángel Nieto, los últimos momentos de su padre fueron "muy incómodos", ya que no veía ni hablaba. Pero, gracias a Anne Germaine, ha podido constatar que sí escuchó lo que le dijo en su lecho de muerte.
Tras despedirse de Anne Germaine, Nieto reconoció que la experiencia le había "impactado bastante", dado que había dicho muchas cosas de su padre que "eran verdad", e hizo hincapié en datos muy concretos de los que le había hablado la médium. Además de su agonía en el hospital, Germaine también "vió" una caja de herramientas (padre e hijo eran apasionados del motor), una estatuilla de San Cristóbal (patrón de los conductores del que eran muy devotos) y un álbum con todos los recortes de la trayectoria del ex piloto que meticulosamente confeccionaba su hermana.
El recuerdo de Santiago Herrero
Pero el padre de Ángel Nieto no fue el único que quería hablar con el deportista. Anne veía a su lado a un joven en traje de motorista, antiguo compañero suyo que, según Ángel debía de tratarse de Santiago Herrero, fallecido hace más de 40 años.
Este espíritu que aparentaba no más de 30 años de edad agradeció a su ex compañero que cuidase de él en vida y hasta se permitió bromear con él: "No siempre ganabas tú".