El teléfono móvil puede producir comportamientos anormales en los niños

INFORMATIVOS TELECINCO/AGENCIAS 07/12/2010 16:59

Los investigadores han estudiado los efectos que tienen sobre la salud el uso de telefónos móviles y han encontrado pruebas de que cuando las mujeres embarazadas lo utilizan con regularidad, sus hijos son más propensos a tener problemas de conducta, según la web de la cadena de televisión NBC.

El estudio, que ha avivado una vez más la controversia sobre la seguridad de los teléfonos móviles, no demuestra que el uso de estos provoca los problemas de conducta, pero los investigadores sugieren que vale la pena tenerlo en cuenta y seguir profundizando en el asunto.

"Es difícil entender cómo dosis bajas de radiación podría influenciar", dijo el doctor Leeka Kheifets, epidemiólogo de la Universidad de California en Los Ángeles, quien dirigió el estudio. "Sin embargo, es algo que debe ser seguido."

Kheifets y su equipo analizaron los datos de 28.000 niños de 7 años de edad y de sus madres que estuvieron embarazadas entre 1996 y 2002.

Las madres de alrededor del 3 % de los niños dijeron que sus hijos tenían problemas de conducta, y otro 3 % mostraron un comportamiento anormal, como la desobediencia o problemas emocionales.

Los niños cuyas madres usaron teléfonos móviles durante el embarazo y a su vez los utilizaron ellos mismos de forma precoz resultaron un 50 % más propensos a tener problemas de conducta, según los investigadores que publicaron su estudio en la revista de 'Journal of Epidemiology and Community Health'.

Los niños cuyas madres utilizan los teléfonos, pero que sus hijos no los usan eran un 40 % más propensos a tener problemas de conducta, aunque no a tener epilepsia o retraso en el desarrollo.

Unos 5.000 millones de teléfonos móviles están en uso en todo el mundo. La Organización Mundial de la Salud, la Sociedad Americana del Cáncer y los Institutos Nacionales de Salud no han encontrado evidencia de que el uso de celulares pueden dañar la salud.

En mayo pasado, los expertos que estudiaron a 13.000 usuarios de teléfonos móviles durante más de 10 años buscaban indicios sobre la relación entre los tumores cerebrales y el uso de los dispositivos de comunicación. Las conclusiones no resultaron concluyentes.