"En la primera parte mantuvimos al Barça en registros ofensivos bajos respecto a la media, pero luego no tuvimos ideas ni determinación en ataque, y permitiendo 21 asistencias y con nuestros es imposible jugar bien y tener opciones de ganar", manifestó en rueda de prensa.
Avisó a sus jugadores antes del partido de que sería difícil jugar contra el Barça, pero no funcionó su plan. "Sabíamos que ellos tendrían una motivación extra tras la serie de derrotas, dije a los jugadores que debíamos dar un paso más y ser agresivos. Pero fuimos pasivos", lamentó.
"Ahora mismo no pensamos en el final de la Euroliga sino en el presente. Hay partidos como el de hoy que no hemos jugado bien y que pueden hacerte caer y tirar atrás o servir como motivación, depende de cómo lo gestiones", argumentó el técnico griego de los del Pireo, que han perdido su primer partido en esta Euroliga.