"Estoy muy honrado de continuar la aventura con el equipo de Francia y agradezco a los dirigentes de la Federación su confianza. Hablé de un hermoso reto en Río y lo sigo haciendo", comentó el entrenador tras implantar su firma en su nuevo contrato, consciente de que el equipo tendrá que llevar a cabo un cambio generacional.
Para ello, Collet afirmó sentirse "con entusiasmo y ambición", después de calificar este martes como "el final de un ciclo" debido al retiro internacional de varias de sus estrellas.
"Hay que mirar hacia adelante. Un nuevo modo de funcionamiento se desarrollará en torno a unos valores verdaderos y unas obligaciones. Lo que debe guiar a este nuevo equipo de Francia es la ambición, pero también unas reglas que nos permitirán avanzar juntos en un nuevo contexto", expuso, asegurando que debe cambiar algunas facetas después de haber caído contra España en los Juegos de Río en cuartos de final.
"El grupo se ampliará y requerirá de todos para trabajar plenamente por el bien de los objetivos de selección y sus victorias", resaltó el campeón de Europa en 2013, optimista de cara a una nueva era, además de recordar los éxitos que viene cosechando el vestuario desde su estancia al mando de Francia.
Por su parte, el presidente de la Federación Francesa de Baloncesto, Jean-Pierre Siutat, le denominó como "la persona ideal" para seguir al mando de un "proyecto ambicioso", recalcando el objetivo claro de clasificarse para Tokyo 2020.