"Mis victorias en 2011 y 2012 fueron de lo mejor porque es una de las carreras más duras del año. Ganar aquí es un momento increíble y te mereces el champán. Es una carrera muy larga, las dos horas que dura parece que van a durar para siempre. El circuito es matador con tanto bache, no se puede cometer ni un error", apuntó Vettel en declaraciones facilitadas por su equipo.
El otro obstáculo para los pilotos en las pruebas asiáticas pasa por los horarios. "Me despierto a la hora de comer y desayuno a las dos de la tarde. Es un poco extraño comer por la noche y acostarte bien entrada la madrugada. Pero ya lo hemos hecho los últimos años y ya parece más normal que la primera vez", explicó.
Por su parte, su compañero Mark Webber coincidió en la importancia de "superar los baches" para lograr un buen resultado en Singapur. "Necesitas hacer bien el último sector. Finalizar en el podio es mi mejor resultado aquí, es una gran recompensa después de una carrera tan larga y calurosa. Los podios de 2010 y 2011 fueron momentos especiales", rememoró el australiano.