"Dura, complicada, nefasta... Así, todos los calificativos negativos que sepan y encuentren. Es la forma en la que la familia del Real Murcia CF SAD ha amanecido tras conocer el fallecimiento de Manuel Preciado Rebolledo", afirmaba en un comunicado el Real Murcia sobre la muerte del que fuese entrenador del club en la temporada 2004-2005.
El club destacó que "a pesar de que los resultados no fueron los deseados, el técnico cántabro se ganó a la familia murcianista". "Siempre tenía una sonrisa en la cara. El buen ambiente era su arma diaria", concluyó el club.