Los de Luis Enrique volvían al Camp Nou tras una semana agitada en la que los cruces de acusaciones tras el derbi copero frente al Espanyol habían dejado en un segundo plano el aspecto deportivo. Sin embargo, los culés eran conscientes de la necesidad de sumar los tres puntos si no querían verse superados en la clasificación por el Atlético. Y con esta idea saltaron al campo.
La primera parte fue un auténtico monólogo del conjunto azulgrana. El Granada defendía con su línea de atrás muy adelantada, y el Barcelona se encontraba muy cómodo. De hecho, la primera gran oportunidad del partido llegó transcurridos tan solo cuatro minutos de juego, cuando Jordi Alba mandó el esférico fuera tras un magnífico pase en largo de Messi a la espalda de los zagueros.
Sin embargo, el gol no se hizo esperar, y cuatro minutos más tarde Leo Messi hizo el primero de la tarde a pase de Arda Turan, tras una bonita jugada de combinación de los de Luis Enrique. En el minuto 14, el argentino apareció de nuevo para poner el segundo en el marcador, después de una auténtica obra de arte de la 'MSN' en la frontal del área; el argentino llegó muy justo, pero consiguió rematar el pase de Luis Suárez para hacer el doblete.
El propio uruguayo pudo hacer el tercero en el minuto 27, pero la mandó fuera cuando la grada ya cantaba el gol. Tras esto, el conjunto azulgrana bajó el ritmo de su juego, pero las ocasiones se seguían sucediendo. La tripleta atacante -formada por Messi, Suárez y Neymar- fue una amenaza constante, y pudo hacer la distancia mayor, pero finalmente el 2-0 se mantuvo. Por su parte, Rochina fue el que más peligro creó en el lado andaluz.
En la reanudación, Sandoval dio entrada a Mainz en detrimento de Khrin y, a partir de entonces, se vieron los mejores minutos de un Granada mejor plantado sobre el verde. El conjunto nazarí fue mucho más intenso en la presión, pero ni siquiera esto sirvió a los andaluces para incomodar al Barcelona. De hecho, el tercero de la tarde llegó antes del primer cuarto de hora de la segunda mitad; Neymar mandó el balón al palo y Messi, más listo que nadie, enganchó el rechazo en la frontal del área para completar su 'hat-trick'.
A partir de entonces, el juego volvió a ralentizarse, pero la apisonadora azulgrana continuó a lo suyo. Y así llegó el gol de Neymar, que había hecho méritos suficientes durante todo el encuentro para anotar. Con Andrés Fernández ya vencido, el brasileño optó para picar el balón y completar así la goleada, a siete minutos para el final.
Con esta goleada, el FC Barcelona vuelve a la senda de la victoria tras el empate sin goles frente al Espanyol y recupera la primera plaza, con un punto de ventaja sobre el Atlético de Madrid, a la espera de lo que hagan los del 'Cholo' frente al Celta este domingo. Por su parte, el Granada se mantiene a las puertas de los puestos de descenso, empatados a 17 puntos con La Real Sociedad y Las Palmas.