El 'nuevo' Maracaná, el gran atractivo de los seis estadios que acogerán la Confederaciones

EUROPA PRESS 14/06/2013 11:00

Maracaná pasó a la historia por el famoso partido entre Uruguay y Brasil en 1950, en el que los 'charrúas' se impusieron a la 'canarinha' contra todo pronóstico y dio lugar al famoso 'Marazanazo'.

El estadio brasileño llegó a tener una capacidad para 200.000 personas y tiene varios récords de asistencia de público en la historia del fútbol, pero tras su última remodelación para la cita mundialista, el aforo quedó reducido a 76.935 espectadores. Este mítico estadio se reinaguró el pasado 2 de junio con un partido amistoso entre las selecciones de Brasil e Inglaterra (2-2).

El estadio 'más grande del mundo' albergará en esta edición de la Copa Confederaciones un total de tres partidos, entre ellos la final del 30 de junio. Sin ir más lejos, la selección española disputará en Maracaná su segundo partido de la fase de grupos ante Tahití, el 20 de junio.

El Arena Pernambuco de Recife será otro de los escenarios emblemáticos donde tendrá lugar el evento organizado por la FIFA. Este estadio ya acogió un partido del Mundial de 1950 disputado entre Chile y Estados Unidos. Tiene una capacidad para 43.921 personas y será donde España debute ante Uruguay el 16 junio.

El tercer partido de la campeona del Mundo, que disputará ante Nigeria, tendrá lugar en el estadio Castelao de Fortaleza. Construido en 1973, este estadio ha sido completamene remodelado para la cita mundialista de Brasil y tiene una aforo para 64.846 espectadores.

Por otro lado, el Estadio Nacional de Brasilia es uno de los recintos más imponentes del país sudamericano y el segundo más grande, con capacidad para 70.042 personas. Es uno de los complejos arquitectónicos más modernos de la capital brasileña y donde se disputará el partido inagural de la Copa Confederaciones entre Brasil y Japón.

Salvador, primera capital de Brasil, recibirá la Copa Mundial con un nuevo recinto: el Fonte Nova, escenario de grandes duelos del fútbol de brasileño como el clásico Ba-Vi. El Fonte Nova fue derribado para dejar sitio a unas instalaciones modernas para 56.500 espectadores, que albergarán cuatro encuentros de la primera fase del Mundial de 2014.