Según Paes, el día de la inauguración en el estadio Maracaná será una jornada crítica para los cariocas. "Quiero hacer un llamamiento a la población de Río de Janeiro: decretamos festivo porque es un día muy complejo para la ciudad, con gran cantidad de jefes de Estado, delegaciones y atletas viniendo a Barra da Tijuca", explicó a periodistas Paes, en referencia al barrio del oeste de la ciudad.
"La gente tiene que organizarse para hacer actividades de ocio cerca de casa, evitando viajar en coche, ya que será una situación muy complicada", agregó.
Entre los lugares más problemáticos mencionados por el alcalde están Barra da Tijuca, Copacabana, Maracaná y las autopistas circundantes, por donde pasarán las comitivas. "Pido disculpas, pero será un día especial (...). Es un honor recibir el evento, pero requiere un poco de sacrificio", indicó Paes.
El alcalde, que transportó el miércoles la antorcha olímpica y estará presente en la inauguración de los Juegos, dijo también que está preparado para recibir los abucheos tradicionales dirigidos a los políticos en los principales eventos de Brasil. "Es parte de la vida pública (...). Voy a entrar con la bandera olímpica, orgulloso de representar a mi ciudad y a mi país", sostuvo.