"Es una gran victoria que significa un regalo de cumpleaños atrasado. Después de sufrir en el Aubisque, ha llegado la mejor victoria de mi carrera. Es increíble decir que he ganado en una Gran Vuelta", señaló el corredor, que cumplió el pasado sábado 30 años, incrédulo al término de la prueba.
Además, Drucker habló de la polémica generada por la repesca de cerca de 100 ciclistas que tuvo lugar este domingo, viéndose él mismo involucrado en este proceso. "Es una situación difícil, la carrera se endureció mucho y si no hubiera sido por eso no hubiéramos estado tantos corredores atrás. Agradezco esa repesca, pero no quisimos hacerlo así", manifestó, después de haber quedado fuera de control en la jornada número 15.
Por último, el luxemburgués resaltó la dureza con la que vivió los últimos 10 kilómetros, los cuales recordó como "muy complicados" a causa de las múltiples rotondas que se sucedieron. "Por suerte, llevábamos viento trasero y eso nos ha ayudado mucho", apuntó, radiante ante un éxito inesperado.