España descendió de categoría hace siete años en Tallin en la que ya militó años atrás, y ahora se medirá a Finlandia, Holanda, Italia, Portugal, Rumania, República Checa y Suecia con el objetivo de ascender en una competición en la que llegó a subir al podio masculino en tres ediciones (1994, 1999 y 2005).
El equipo español cuenta con la presencia masculina de Jorge Ureña, actual subcampeón continental de heptatlón en pista cubierta, con la condición de líder. El de Onil, además, de intentar conseguir los máximos puntos posibles para España, buscará lograr la mínima necesaria para disputar el Campeonato del Mundo de este verano en Londres para el que necesita alcanzar los 8.100 puntos.
Jonay Jordán, Vicente Guardiola y Mario Arancón completan el equipo masculino, mermado en su potencial por la baja del lesionado Pau Tonnesen y de Pablo Trescolí, que disputará el Campeonato de Europa Sub-23, mientras que la representación femenina está encabezada por Andrea Mediba, campeona de España. A su lado estarán Carmen Ramos, que viene de batir la plusmarca española júnior en Arona con 5.550 puntos, Yanira Soto y Carmen Romero.
El alicantino Jorge Ureña destacó que si todo sale "bien" y las pruebas salen "como se esperan" lograr los puntos necesarios "es una marca muy asequible", deseando que el viento no le permitan "'cagarla'".
"Si hacemos una buena actuación podemos subir. Este año nos toca contra Holanda y la República Checa que tienen buen equipo pero hay que ir y sufrir por el ascenso", comentó el atleta, en declaraciones concedidas a la RFEA, donde también destacó que en los últimos años están saliendo "buenos atletas, con posibilidades en el futuro".