El presidente de la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP), Chris Kermode, acompañado por dos de sus más altos ejecutivos, Laurent Delanney y Mark Webster, ha sido el encargado de entregar el trofeo a los directivos del torneo barcelonés desplazados a Montecarlo, Idoya Sierra y Oriol Granell.
De entre los más de 30 torneos europeos de las categorías ATP 250, ATP 500 y Masters 1.000 representados en el mitin han sido asimismo premiados los de Roma, por su mejora en la animación de los aficionados; Basilea, por las actividades promocionales y de relaciones públicas; Queens, por las atenciones a los jugadores, y Halle, por los servicios a los medios de comunicación.
El reconocimiento al torneo del Real Club Tenis Barcelona, un premio a la excelencia y al trabajo incansable de los últimos años, como han asegurado Sierra y Granell, se debe a la "transformación del club en un torneo durante los días de la competición, a la excelente convivencia entre socios y jugadores, a la distribución de espacios y a las soluciones encontradas para las entradas y salidas de la pista de los jugadores".