"Creo que más que sentirme cansado de la semana pasada es quizás que me siento más un poco dolorido. Fue una semana muy dura y vine a Madrid un poco dolorido. El lunes tuve que visitar al doctor, no pude entrenar y también la altitud marca la diferencia", señaló Carreño en rueda de prensa tras caer ante el francés Benoit Paire.
De todos modos, el asturiano no buscó excusas en el cansancio. "Creo que fueron otras las cosas que me hicieron perder", remarcó, advirtiendo que tampoco sintió "más presión" por jugar en España. "Cuando juegas en este tipo de torneos, siempre tienes presión y creo que estoy gestionando bastante bien esto", añadió.
"Voy a intentar solucionar mis problemas físicos y si logro llegar a Roma en las condiciones correctas, jugaré. Roma y Roland Garros son torneos realmente importantes en los que necesito estar al cien por cien para poder ganar partidos", apuntó el gijonés de cara al futuro.