Una tradición de más de 50 años: surfear en el Círculo Polar bajo el sol de medianoche

Daniel Muñoz | (Foto: Chris Burkard) 07/04/2016 08:30

Lofoten es un lugar mítico entre los amantes del surf. La sana locura de subirse a una tabla para cabalgar olas tiene uno de sus santuarios en Noruega. Al norte del Círculo Polar, esta localidad vive en su mayor parte de los turistas, que cada vez acuden en un mayor número para disfrutar de la maravillas del paisaje y poder surfear cualquier día del año. La temperatura no es la ideal, el agua ronda los 0º y fuera a poco más de cinco, pero cada vez más caravanas se amontonan en Lofoten para practicar el surf. De hecho, ya se están creando escuelas de surf para poder iniciarse en el mundillo.

Si lo que quieres es sol cuando te subas a tu tabla, hay destinos mejores. Eso sí, sólo en Lofoten podrás hacer snow por la mañana y surf por la tarde. Y si tienes la posibilidad de viajar en verano, podrás surfear de noche bajo los rayos del sol y de fondo las montañas nevadas. Practicar surf en los meses estivales es posible durante casi 24 horas al día. Un lujo que cada vez llama a más surfistas de todo el mundo.

La tradición de surfear en el Círculo Polar se inició hace más de 50 años. Hacia 1960, los primeros ‘locos’ que se atrevieron a subirse a una tabla en unas condiciones que invitan muy poco, son ahora los pioneros de casi un culto de todo surfista de bien. Hay que ser realmente un apasionado de este deporte para aguantar el frío, el viento e intentar surfear en unas condiciones que serían mejores en otros lugares. La ola media alcanza unos 2,5 metros y el tiempo que se está sobre ella no es demasiado.

(Fotos: Chris Burkard)

Pero nadie te podrá quitar el placer de hacer surf de noche y con sol. De finales de mayo a julio, el sol casi no se oculta y solo dos horas de cielo gris son la noche en Lofoten, esta localidad turística y dedicada a la pesca del bacalao. Así es este archipiélago noruego en julio, al revés que en enero, cuando el sol apenas aparece y el mar tiene un color azul único y el blanco de la nieve en las montañas se convierte en rosa.

Lofoten está hecho para los turistas menos acomodados y que busquen un paraíso. Este templo del surf es un punto en el mapa imprescindible para los amantes del surf.