La selección española no ha podido tener mejor estreno en la competición. A los 17 minutos los de Vicente Del Bosque ya ganaban por tres a cero ante una débil selección neozelandesa que permitió que Fernando Torres se luciera marcando los primeros tantos.
Los tres goles del 'niño Torres' llegaron en jugadas desde la banda izquierda y el madrileño aprovechó para sumar 22 goles con la selección. Sin embargo, el despliegue de juego y técnica de los jugadores españoles sirvió para llegar al descanso con cuatro goles en el marcador, el último el de Cesc Fábregas.
En la segunda parte, España estaba mucha más relajada. Del Bosque dio entonces paso a los descansos esperados (Xavi y Sergio Ramos) y experimentó nuevas formas de juego como apostar en el mediocampo con cinco centrocampistas.
David Villa, que no tuvo su día más acertado, tuvo por fin oportunidad de cerrar el partido con el quinto gol para La Roja, que dejó claro que los Campeones de Europa aspiran a todo. EPF