Llegan las ansiadas vacaciones estivales. Una vez preparada la maleta, nos ponemos de viaje para disfrutar y desconectar unos días de la rutina diaria. Es el momento de cerrar la vivienda, no sin antes seguir una serie de pautas para evitar los robos. Y es que hasta los objetos más insospechados, como los buzones, pueden servir de información a los delincuentes.
Este verano de 2023 será el más caro para los españoles debido al incremento de precios en vuelos, hostelería y alojamiento, tanto hotelero como de camping. Por ello, conviene estar alerta ante los paquetes vacacionales que nos ofrecen a bajo precio. Con el objetivo de ahorrar, lo primero que debemos hacer antes de salir de casa es comprobar que está todo bien apagado.
Son muchos los electrodomésticos y distintos aparatos que tenemos en el hogar y que, en ocasiones, permanecen conectados a la red eléctrica a pesar de que no los estemos utilizando. El televisor, el router, el ordenador, la cafetera, la tostadora, el microondas e incluso el cargador del teléfono móvil.
Todo ello nos genera un gasto sin darnos cuenta. Bueno, mejor dicho, sin apreciarlo en el momento, porque en las facturas sí que se nota. Es lo que se denomina como consumo fantasma. Según datos del Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía (IDAE), entre el 7% y el 11% del gasto eléctrico anual de los hogares españoles corresponde a ese consumo silencioso.
Dicho esto, resulta evidente la importancia de desenchufar los electrodomésticos que podamos, que seguramente sean todos excepto el frigorífico y el congelador, para que dejen de dañarnos el bolsillo cuando estamos de vacaciones.
Al respecto, cabe destacar que tanto los aparatos que marcan la hora, como pueden ser el microondas o el horno, como los que mantienen una luz encendida en reposo, habitual en los televisores si se apagan con el mando a distancia, siguen consumiendo.
Por cierto, hay que acordarse de la caldera. Si no estamos en la vivienda, es obvio que no necesitamos agua caliente. Y apagándola durante unos días podemos conseguir que el consumo descienda hasta un 25%.
Otro gesto que nos permitirá ahorrar, incluso cuando estamos durante el año en casa, será instalando temporizadores en los aparatos eléctricos. De este modo, además de apagarse solos a la hora que deseemos, evitaremos que se queden encendidos si nos dormimos en el sofá o simplemente nos despistamos.
Por último, indicar que también las regletas son un buen invento para no dejarse unas cuantas monedas por el camino. Y es que podemos apagar a la vez todos los electrodomésticos que no estemos usando siempre que los enchufes estén conectados al citado objeto. Ahora, tan sólo queda ponerlo en práctica.