"El satisfactorio desarrollo coyuntural no nos ofrece más dinero para gastar, sino que conduce simplemente a que tengamos que hacer menos deudas de las que teníamos previsto", señala Merkel en unas declaraciones que publica hoy el rotativo Ruhr Nachrichten.
Tras subrayar que "la consolidación presupuestaria debe tener prioridad", Merkel comenta que el endeudamiento debe ser detenido para que futuras generaciones tengan margen de maniobra a la hora de hacer inversiones.
"Esto cuesta esfuerzos apreciables", destaca la canciller federal, quien indica que lo importante ahora es dar los primeros pasos para simplificar el sistema impositivo.
Las declaraciones de Merkel coinciden con la reunión en Baden-Baden del grupo de trabajo de expertos del Estado y los estados federados para estimar los ingresos fiscales para este año y los dos próximos.
Gracias al sorprendente crecimiento económico registrado ya este año y que se espera continúe en los próximos, el Gobierno federal espera que los ingresos fiscales aumenten hasta 2012 en 62.000 millones de euros más de lo calculado la pasada primavera.
La canciller alemana se muestra además a favor de posibles subidas salariales y señala que "si las empresas cuentan con margen para un desarrollo salarial positivo, esto resulta también favorable con vistas a la coyuntura interna".
Sin embargo subraya que la situación de la coyuntura no es igual en los distintos sectores, destaca que los convenios deben ser negociados entre patronal y sindicatos, y recuerda que el Gobierno no tiene intención de inmiscuirse en esos procesos.