Sebastián pide a Sberbank una solución industrial, que no política para Opel

AGENCIA EFE 05/06/2009 11:32

"Sebastián ha pedido que se tome una solución industrial, pero no política. La planta española de Opel en Figueruelas (Zaragoza) es la segunda más competitiva de Europa", informó a Efe un portavoz del ministro.

El titular de Industria español hizo estas afirmaciones durante la reunión mantenida con el presidente del banco ruso Sberbank, German Gref, en el marco del Foro Económico internacional de San Petersburgo.

Gref respondió a Sebastián que Sberbank, que anunció ayer que concederá 500 millones de dólares de crédito para salvar Opel con lo que se obtendrá el 35 por ciento de la compañía, "está interesada en la operación por motivos financieros, no industriales", señaló la fuente.

"La gestión industrial se la dejan en manos de Magna", el fabricante de componentes austríaco-canadiense Magna que alcanzó la pasada semana un acuerdo con General Motors para la compra de Opel, agregó.

El portavoz insistió en que en las reuniones mantenidas en los últimos días con representantes de General Motors y Magna, todos han expresado su disposición a adoptar soluciones industriales para la situación de Opel.

"Queremos una solución europea en el marco de la Unión Europea", subrayó.

Además, Sebastián expresó a Gref el apoyo incondicional del Gobierno español a la planta de Figueruelas, que cuenta con una plantilla de 7.500 trabajadores.

Sebastián recalcó durante el encuentro que la factoría zaragozana tiene una productividad entre un 30% y un 40% superior a otras plantas, según informaron fuentes diplomáticas españolas en un comunicado.

Al respecto, Gref adelantó ayer que "la plantilla de Opel en Alemania experimentará mínimos recortes, pero, desgraciadamente, los recortes serán grandes en el extranjero".

"En varios países los puestos de trabajo se verán afectados", dijo.

Sebastián ha insistido en las últimas semanas de que Figueruelas "tiene todas las de ganar" por ser una de las plantas más competitivas de Opel.

No obstante, las autoridades de Aragón, región española donde se encuentra la planta, pronosticaron que ésta deberá hacer "algún sacrificio" y reducir su capacidad de producción.