Tras cumplir los objetivos planteados para el periodo 2013-2015, el gestor técnico del sistema gasista se propone ahora invertir 430 millones de euros al año de media en tres años, hasta sumar 1.290 millones, de los que cerca de la mitad se destinará a infraestructuras en España.
Las inversiones internacionales actualmente comprometidas representarán al menos el 13% de los beneficios en 2017 y alrededor del 25% en 2020, y los dividendos obtenidos a través de estos proyectos pasarán de 24,5 millones de euros en la actualidad a 60 millones en 2017 y a 100 millones en 2020.
Enagás también prevé que la demanda de gas en España aumente un 4% de media anual en los próximos tres años, gracias a una mejora del contexto económico y a una mayor participación de este hidrocarburo en la matriz energética.
Para 2015, la compañía prevé elevar un 0,5% el beneficio neto, así como repartir un dividendo con cargo a los resultados del ejercicio de 1,32 euros por acción, lo que supone un incremento del 1,5% respecto al año anterior.