En rueda de prensa en el Congreso, Centella ha apuntado que "lo que hay detrás del rescate de Chipre no es ni más ni menos que el fracaso de la UE en toda su claridad, el fracaso del modelo de una UE que sigue pensando que rescatando a la banca se pueden resolver los problemas de la ciudadanía pero, cuando la banca no da para más, son los propios usuarios los que tienen que pagar las consecuencias".
"El Gobierno tiene que empezar a comprender que tiene que ponerse del lado de los ciudadanos. Hace semanas le pedimos que se hiciera una quita, pero no a los usuarios bancarios sino a la deuda. Hay que elegir si se hace una quita revisando la deuda o a los ciudadanos, pero la UE fracasa y sigue apostando por rescatar a la banca. Por eso, habrá que elegir: o se hace una quita a la deuda o nos están engañando y harán una quita a los ciudadanos", ha afirmado.
Por eso, Centella ha exigido a Montoro y Rajoy que "claramente se comprometan" con lo que piensan hacer y que digan expresamente que "no van a utilizar el 'método Chipre' en la banca española" si se demuestra que ésta no puede devolver el rescate europeo. "El silencio puede ser complicidad, y nos sigue preocupando que se pueda dar esa circunstancia en este país", ha reconocido el diputado.
SÓLO HAY QUE CUMPLIR LA NORMATIVA
Por su parte, el diputado de ICV Joan Coscubiela ha apostillado que para optar por una quita a la deuda "no hace falta modificar la normativa comunitaria" sino "simplemente garantizar que se cumple y no generar ninguna incertidumbre más".
"Quienes en estos momentos generan incertidumbre son los gobernantes europeos, que toman decisiones sin control democrático y, luego, le imputan esa decisiones a una etérea Europa, cuando es una decisión intergubernamental. Por eso pedimos explicaciones, no a Europa, sino a Rajoy, porque fue su ministro de Economía quien, con otros, adoptó una decisión que generó incertidumbre en la gente", ha señalado.
Además, ha criticado que algunos de estos gobernantes europeos sitúen los derechos de las entidades financieras por delante de los derechos ciudadanos, y ha advertido de que "eso sin duda está agotando el modelo de intervención europea".