Así lo explicó hoy el presidente de la entidad, Ángel Ron, que dijo, igual que hizo esta semana el presidente del BBVA, Francisco González, que ya se empieza a ver luz al final del túnel, en referencia a la situación de la economía española.
Para recuperar la confianza de los mercados internacionales, bancos y cajas deben explicar con claridad al mercado su exposición real al sector inmobiliario y las cajas tienen que decir cómo han empleado el dinero público que han recibido a través del FROB, lo que contribuiría a despejar las dudas sobre la economía española.
En cualquier caso, hay que esperar a que se apruebe el decreto en el que el Gobierno detallará los requisitos de capital básico mínimo que tienen que tener las entidades y cómo deben considerar las cajas las ayudas recibidas, dijo Ron, al que le parece "muy bien" que el Gobierno pida más capital mínimo a las cajas que a los bancos cotizados.
"Quien pone los fondos pone las reglas", dijo Ron, en referencia al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) puesto en marcha por el Gobierno, al que han acudido muchas cajas, algunas de las cuales podrán emplear parte de ese dinero en elevar sus ratios de capital básico o "core capital".
Preguntado por el papel que tendrá el Popular en la reestructuración del sector financiero, Ron aseguró que estaría dispuesto a aprovechar todas las oportunidades de crecimiento que se le presenten, aunque ahora mismo no tienen nada "en el radar" y no se les ha ofrecido nadie.
Sin embargo, en sus planes no entran, de momento, las fusiones, explicó Ron cuando le preguntaron concretamente por el Banco Sabadell, puesto que el Popular tiene claro que en cualquier operación de este tipo, lo que querría es "mandar".
Ron se mostró de acuerdo con el resto de sus colegas de la gran banca en que las medidas de reforma anunciadas por el Gobierno "van en la buena dirección", aunque dejó claro que aún está por ver el resultado de esas reformas en la generación de empleo y en el crecimiento económico.
No hay que bajar la guardia, pero es cierto que ya se ve luz al final del túnel, dijo Ron, para quien la probabilidad de que España tenga que ser rescatada "es cero".
Sin embargo, estas necesarias reformas para recuperar la solvencia de las cuentas públicas, no despejan del todo la incertidumbre sobre la economía española, que tiene unos niveles de paro "inaceptablemente altos", dijo.
Por estas y otras razones el ajuste que ha emprendido el Gobierno es "tan duro como necesario".
Volviendo al banco, el "core capital" -capital mas reservas sobre activos ponderados por riesgos- se situó en el 9,43 % al cierre del ejercicio, frente al 8,57 % de un año antes, con lo que la entidad rebasaría los mínimos de capital del 8 % que se le pedirán a los bancos cotizados.
La tasa de morosidad se elevó hasta el 5,27% a cierre del ejercicio, con lo que continúa por debajo de la media de la banca española, aunque empeora frente al 4,63% de un año antes, explica la entidad, que añade que el pico podría estar en torno al 5,50 % y podría alcanzarse este año.
El Banco Popular terminó el pasado ejercicio con una morosidad del sector promotor e inmobiliario del 14,5 %, para una cartera de 17.840 millones de euros.
Aunque las perspectivas son buenas, aún queda camino por recorrer, dijo Ron, que añadió que hay que seguir haciendo los deberes y confió en que la entidad seguirá captando clientes en 2011, atraídos por la fortaleza y el modelo de negocio del banco.