El banco suizo UBS obtuvo un beneficio atribuido de 1.018 millones de francos suizos (830 millones de euros) en el tercer trimestre del año, lo que representa una caída del 38,8% respecto al mismo periodo de 2010, debido en gran medida al impacto negativo de las pérdidas causadas por las operaciones no autorizadas llevadas a cabo por el 'trader' de su división de banca de inversión Kweku Adoboli.
La cifra de negocio operativa de la mayor entidad helvética alcanzó los 6.412 millones de francos suizos (5.230 millones de euros9, un 3,7% menos, mientras que su resultado operativo antes de impuestos aumentó un 19,8%, hasta 980 millones de francos suizos (799 millones d euros).
De este modo, en los nueve primeros meses del ejercicio UBS obtuvo un beneficio neto atribuido de 3.840 millones de francos suizos (3.133 millones de euros), un 34,6% menos, mientras que su resultado operativo bruto retrocedió un 22%, hasta 4.868 millones de francos suizos (3.972 millones de euros).
"Las perspectivas de crecimiento global dependen en gran medida de la satisfactoria resolución de los problemas de deuda soberana y del sector bancario en la zona euro, así como de la evolución del crecimiento, el empleo y el déficit de EEUU", explicó la entidad.
"En ausencia de una solución, las actuales condiciones de los mercados y de la actividad comercial dificilmente mejorarán materialmente", añadió.
UBS reconoció a mediados de septiembre pérdidas por un importe cercano a 2.000 millones de dólares en sus cuentas, como consecuencia de operaciones no autorizadas realizadas por Kweku Adoboli, un operador de 31 años de su división de banca de inversión.