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Enero está siendo frenético. La última muestra de ello será el repunte del termómetro a las puertas de cambiar de mes, con valores máximos cercanos a los 30 grados en algunas provincias por la llegada de una masa de aire subtropical. Más llamativo resulta todavía este aumento de temperaturas si tenemos en cuenta los datos de hace tan solo dos semanas. Por ejemplo en Teruel, el día 12 se alcanzaron los -21ºC, y la previsión es que se excedan los 20ºC el jueves. Una diferencia de al menos 40 grados.
El flujo de oeste, procedente del Atlántico, se va a mantener. Sin embargo, tendremos un paréntesis de las borrascas y se colará el anticiclón en la Península.
Traerá tiempo muy estable, seco y aire cálido para estas fechas. En casi toda España se alcanzarán o superarán los 15ºC, con algunas excepciones en el interior y entorno de grandes ríos por la formación de nieblas persistentes. En zonas del sur y del este, y en las islas, podrán sobrepasarse los 25ºC a partir del miércoles.
No se descarta que pueda registrarse algún récord para el mes de enero en la Comunidad Valenciana y Murcia, donde se rozarán los 30 grados y podrían superarse, aunque más calor todavía pasarán en las islas orientales de Canarias. En Fuerteventura la tarde del jueves será calurosa para la fecha, además de calimosa por una irrupción de polvo en suspensión procedente de África.
Por la noche, asimismo, no se descarta que se bata algún récord de temperatura mínima más alta registrada en enero. Los valores serán hasta 10 grados más altos de lo normal. En el norte de Galicia o de Asturias podrán rozarse los 15ºC, así como en Valencia o Sevilla. Únicamente hará en torno a 5ºC o menos en zonas de montaña, y las heladas tan solo se esperan en Pirineos.
En Pirineos, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha elevado el riesgo a nivel rojo en el Gállego y Jacetania por aludes que pueden ser muy grandes. El aumento de las temperaturas y las rachas puntuales de viento más fuertes pueden hacer desprender cantidades importantes de nieve en algunas laderas. mucha precaución.
En entornos de ríos, como vimos el lunes, algunas zonas han quedado anegadas por desbordamientos. Ha ocurrido en tramos del Lozoya, del Duero o del Narcea, donde las lluvias y el deshielo han aumentado mucho el caudal en muy poco tiempo.
Una borrasca se va a ir acercando y profundizando por el Atlántico. El viernes nos mandará un frente que atravesará la Península el sábado con “cielos nubosos y precipitaciones que se extenderán de oeste a este, afectando principalmente a Galicia, Cantábrico, Pirineos y sistemas Central, Ibérico y Béticos”, pronostica Aemet.
Algunas rachas de viento serán bastante fuertes de manera generalizada, del norte-noroeste, y las temperaturas irán en descenso, “de modo notable en la mitad sur peninsular”, dice la Aemet.
De nombrarse la borrasca que nos afectará, estaría hablando de ‘Justine’, la cuarta en dos semanas.