Los cambios aún posibles en la ley de amnistía

La ley de amnistía llegará el martes al pleno del Congreso en la que será la última oportunidad para el PSOE y sus socios parlamentarios de introducir cambios en el texto, aún posibles al quedar 'vivas' enmiendas referidas a temas de calado como el tratamiento de los delitos de terrorismo.

La Comisión de Justicia del Congreso aprobó el pasado martes los cambios en el texto pactados por el PSOE con Junts y el resto de sus socios parlamentarios, pero la tramitación permite ahora, en el paso final antes de remitirse al Senado, una última oportunidad para incluir modificaciones de última hora.

Unos cambios que tendrían que ajustarse a las enmiendas que presentaron tanto Junts o ERC en solitario como las que pactaron de manera conjunta o con PNV, y que quedaron sin aprobarse por falta de apoyos suficientes.

Durante el debate en el pleno la presidenta de la cámara puede admitir cambios en las enmiendas ya presentadas cuando ningún grupo parlamentario se oponga a su admisión, algo poco probable en este caso, dado que la ley cuenta con la oposición frontal del PP y Vox.

Por tanto, si el PSOE, Junts, ERC o cualquiera de los grupos que apoya la ley de amnistía quiere introducir modificaciones de último momento deberán ceñirse a las enmiendas que fueron presentadas o las que fueron acordadas o transaccionadas entre dos o más grupos.

Uno de los apartados de la ley que podría modificarse es el relativo al artículo 2, dedicado a lo que queda excluido de la aplicación de la amnistía.

El artículo original incluido en la proposición de ley presentada por el PSOE en noviembre excluía de la amnistía los delitos de terrorismo "siempre y cuando haya recaído sentencia firme".

En el texto pactado el pasado martes por el PSOE y Junts -a partir de un texto de ERC- esa referencia a la sentencia firme se ha borrado del texto, que establece que no serán perdonados los actos de terrorismo que hayan causado violaciones graves de derechos humanos de forma manifiesta y con intención directa.

Esta concreción de los delitos de terrorismo permitiría incluir en la amnistía al caso Tsunami, en el que el juez Manuel García Castellón atribuye al expresident Carles Puigdemont y a la secretaria general de ERC, Marta Rovira, este tipo de delitos. Investiga, entre otros extremos, la relación entre las protestas de 2019 en Cataluña y la muerte por un paro cardíaco de un ciudadano francés en el aeropuerto de El Prat.

El juez García Castellón citó ayer a declarar en calidad de perjudicados a dos agentes de la Policía que resultaron heridos en algunas de las protestas investigadas.

En el auto, dictado apenas dos días después de la enmienda pactada por PSOE, ERC y Junts a la ley de amnistía para incluir los delitos de terrorismo siempre y cuando no hubieran causado violaciones graves de derechos humanos de forma manifiesta y con intención directa, sostiene que no se puede descartar el "ánimo homicida" en las graves lesiones que sufrió uno de esos dos policías en una protesta de los Comités de Defensa de la República (CDR). 

Desde Junts aseguraron la pasada semana que no se fiaban de que -aunque es prácticamente imposible por los tiempos en que se produjo el 'procès' y el estado en que se encuentran los procedimientos judiciales abiertos- finalmente hubiera alguna sentencia firme relativa a delitos de terrorismo en el plazo que resta hasta la entrada en vigor de la ley, por lo que habían preferido que se eliminara la referencia.

Unas de las vías para introducir cambios podría ser la enmienda original de Junts en la que se eliminaba el párrafo relativo al terrorismo, con lo que todos estos delitos serían amnistiables; un objetivo que también buscan otras dos enmiendas pactadas por esta formación con ERC y PNV.

La formación liderada por Carles Puigdemont quiere también extender dos meses el plazo de aplicación de la amnistía -para que abarque desde el 1 noviembre de 2011- con el objetivo de que entren las causas que afectan al personal de la conselleria catalana de Exteriores y que se siguen en el Tribunal de Cuentas.

Junts pactó asimismo otra enmienda con el PNV, en este caso sobre el ámbito objetivo de la ley independentista catalana.

En total, la formación liderada por Puigdemont puede intentar introducir cambios a través de sus once enmiendas, de las tres pactadas con PNV o de la acordada con ERC. A su vez, este grupo mantiene 'vivas' para el debate del martes otras dos enmiendas.

El PP también tiene veinte enmiendas parciales para derogar todos los artículos de una ley que consideran anticonstitucional.

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