Sarkozy ha hechos estas declaraciones cuando los medios de comunicación especulan con la posibilidad de que se hayan producido ambas premisas para liberar a los cooperantes españoles Albert Vilalta y Roque Pascual. Asimismo, el presidente francés calificó de "decisiva" la operación emprendida a finales de julio por las fuerzas galas y mauritanas para tratar de liberar al rehén Michel Germaneau, retenido por AQMI. Tres días más tarde de este operativo, el 25 de julio, los milicianos islamistas anunciaron la ejecución de Germaneau, lo que según Sarkozy demuestra la "barbarie" de la facción de Al Qaeda.
"Francia apoya sin reservas a los gobiernos que pidan ayuda para entrenar, equipar y formar a las fuerzas de cara a eliminar los grupos que amenazan con desestabilizar toda la región del Sahel", agregó.
En febrero, Francia también se vio salpicada por un aparente acuerdo con los terroristas después de la liberación del rehén Pierre Camatte. La puesta en libertad de Camatte se produjo después de que el Gobierno de Malí pusiera en libertad a cuatro prisioneros islamistas como había reclamado Al Qaeda en el Magreb Islámico.
El Gobierno evita hablar sobre el rescate Según la secretaria de Estado, ha sido precisamente "ese trabajo conjunto" el que ha permitido que seis de los siete europeos que llegaron a estar al mismo tiempo en manos de AQMI en el Sahel hayan sido liberados. El séptimo, el francés Michel Germaneu, fue ejecutado por la red terrorista a finales de julio después de una operación del Ejército mauritano, con apoyo de Francia, en Malí en la que murieron varios milicianos.
"La única estrategia no debe consistir en pagar rescates y acceder a liberar prisioneros a cambio de desafortunados inocentes", afirmó Sarkozy en un discurso durante una cumbre de embajadores galos.
La prensa argelina cifró el martes entre 4 y 5 millones de euros el precio que las autoridades españolas habrían pagado por liberar a cada uno de los rehenes, citando fuentes oficiosas, y se queja de que "los Gobiernos de Malí y Mauritania han liberado una vez más a un terrorista de AQMI" a cambio de las liberaciones. En concreto, se referirían a la repatriación del malí Omar Saharaui, el único condenado por el secuestro en noviembre de Albert Vilalta, Roque Pascual y Alicia Gámez.
La secretaria de Estado de Cooperación Internacional, Soraya Rodríguez, ha eludido pronunciarse sobre el vídeo en el que aparece el secuestrador de los dos cooperantes españoles junto a ellos tras ser liberados por Al Qaeda en el Magreb Islámico y ha asegurado que Albert Vilalta y Roque Pascual no le comentaron "nada" sobre este hecho durante el vuelo de regreso a España.
"El Gobierno desde el primer día del secuestro ha estado trabajando minuto a minuto, haciendo todo tipo de gestiones y un trabajo conjunto y de cooperación con los gobiernos de la zona y con los gobiernos de la UE y eso es lo que ha dado lugar a la liberación", ha replicado.
Por otra parte, Rodríguez dijo que Vilalta y Pascual le relataron las "duras condiciones" en las que han pasado los casi nueve meses que permanecieron en el desierto, "de privacidad de cosas que aquí nos parecen normales como es el agua corriente o la electricidad, con grandes limitaciones y carencias".
No obstante, "como ellos mismos dijeron han vivido como los secuestradores", quienes, "dentro de todas estas limitaciones les han tratado bien".