Según reza en la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, la Audiencia Nacional condena al presunto cabecilla, de origen dominicano, a doce años de prisión y al pago de 1,2 millones de euros de multa. A su vez, a los onubenses les ha impuesto la pena de nueve años de prisión a cada uno y el pago de 600.000 euros, y a los demás, penas comprendidas entre cuatro y diez años de cárcel.
El juez considera probado que el 26 de febrero de 2010 compareció el padre de un joven onubense en la comisaría de la Policía Nacional de Huelva solicitando auxilio policial para su hijo que, según apuntó, venía a Huelva en autobús procedente de Madrid y temía por su integridad porque estaba siendo objeto de intimidaciones proferidas.
Este joven había viajado a Madrid días antes para "ser instruido y habilitado para efectuar un viaje a Sudamérica, con el fin de traer cuatro kilos de cocaína a cambio de una cantidad no especificada de dinero", pero antes de que tuviera lugar el viaje, este recapacitó, decidió no hacer el transporte de la droga y volver a Huelva, motivo por el cual comenzó a recibir amenazas para que devolviera los gastos del viaje, cifrados en 2.000 euros.
Tras ello, tanto padre e hijo comenzaron a recibir amenazas y el padre concertó una cita con sus interlocutores, de la que informó a la Policía, que intervino los teléfonos, tras una autorización de un juzgado de La Palma, y pudo averiguar la existencia de una red estructurada de personas dedicada a la introducción de droga en España, previa captación de personas que la traían a cambio de dinero, para su posterior distribución y venta por diversas partes de España.
Así, tras el juicio que se celebró el pasado mes de mayo, la Audiencia ha dictado esta sentencia condenatoria, según ha adelantado en su edición de este martes el diario 'Huelva Información'.