Chávez y Ahmadineyad califican de rotundo fracaso la cumbre del G-20

AGENCIA EFE 03/04/2009 13:02

En un breve acto de inauguración hoy en Teherán del primer banco binacional Irán-Venezuela, Chávez culpó, asimismo, al Fondo Monetario Internacional, al Banco Mundial y a la Organización Mundial de Comercio de la crisis que sacude el mundo y defendió de nuevo el fin del capitalismo y el libre comercio.

"La cumbre del G-20 terminó, sin pena ni gloria. Basta leer las conclusiones, no son para nada las soluciones que el mundo clama, que el mundo requiere ante la gran crisis del capitalismo internacional", afirmó Chávez.

El presidente sudamericano se burló de las soluciones propuestas en la capital británica al considerar que no son más que "las mismas medicinas que están matando al paciente" y señaló a las principales organizaciones financieras internacionales como responsables de la crisis.

"Un billón de dólares, más dinero para un hueco sin fondo. Pero no solo eso, decidieron fortalecer al gran culpable o a unos de los grandes culpables de la crisis, el FMI. Ese fondo habría que eliminarlo y pretenden darle oxígeno", señaló.

"El Banco Mundial es una herramienta del imperialismo y, por si fuera poco, proclaman el fortalecimiento de la OMC y las normas del libre mercado. El dios mercado dicen ellos, instrumento del imperialismo", reiteró.

En este sentido, Chávez proclamó que "llegó la hora del fin del imperialismo. Se hunde el imperialismo y sobre sus cenizas surgirá un mundo nuevo".

Ese nuevo sistema, en el que reinará "la paz, la independencia y la libertad", ha comenzado a crearse en Teherán con el nacimiento del banco binacional, insistió Chavéz,

"Sin duda que este acto de hoy querido hermano es parte del nacimiento de este mundo nuevo. Felicitaciones presidente (Ahmadineyad). Porque aquí si estamos creando soluciones para el fortalecimiento de nuestra economía, para el incremento de nuestro desarrollo social", afirmó.

La apertura del banco binacional Irán- Venezuela es el acto central de la séptima visita que desde el jueves y hasta mañana sábado realiza el presidente venezolano a Irán.

La entidad bancaria, diseñada según ambos países como alternativa a la crisis financiera internacional, comenzará a funcionar con un capital inicial de 1.600 millones de dólares, el mismo monto con el que se desarrollará el Fondo Venezuela-Irán.

Aunque ambos países han señalado que es un instrumento que servirá para diseñar una nueva relación entre los pueblos, los expertos dudan de su viabilidad.

Hoy, durante la inauguración, Ahmadineyad volvió a insistir en esta idea e invitó a las naciones del mundo a emprender proyectos similares.

Ahmadineyad afirmó que "estamos aquí para diseñar y crear un nuevo mundo. Pero los que han hecho daño al mundo han vuelto a fracasar mientras nosotros estamos haciendo algo nuevo. Reuniones como la de Londres no pueden reanimar algo que cae como un muerto".

Nosotros "el G-2 somos ya responsables de todo el mundo, para hacer un mundo mejor para todos. Lo que estamos haciendo parece solo un banco, pero la verdad es que es una acto de voluntad y justicia para todo el mundo. Es un ejemplo de esperanza y vitoria para todos", apostilló.