Los hechos sucedieron, según declaró probado el juzgado y consta en la sentencia de la Audiencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, en junio de 2010. La niña fue a la casa de su abuelo cuando una vecina "vio cómo la menor salía corriendo hacia el descansillo, seguida por el acusado que estaba sin pantalones y enseñando sus genitales", dice la resolución.
En ese momento, según la sentencia, "con ánimo libidinoso", el hombre "le decía a su nieta toca, toca", hechos que fueron presenciados por la niña de tres años de la vecina. No obstante, el juzgado consideró que no ha quedado probado que meses antes hubiera realizado tocamientos a la menor, por lo que se le absuelve de un delito de abusos sexuales.
Además de la pena de prisión, se le impuso la prohibición de aproximarse a su nieta a menos de 500 metros o comunicarse con ella durante dos años, medidas que se extienden a los hermanos de la niña. Contra la sentencia, la defensa presentó un recurso de apelación, alegando error a la hora de analizar la prueba por parte del juzgador.
Pero la Sala considera, tras analizar la causa, las investigaciones realizadas y las pruebas practicadas en el juicio, así como la "motivada" sentencia, que no hay dicho error, precisando que independientemente de la expresión de "toca", el hombre se dirigía hacia su nieta "desnudo de cintura para abajo, persiguiendo a aquella en su huída".