La Guardia Civil custodia los objetos donados para los afectados por el volcán de La Palma
El individuo se quedó con donaciones valoradas en 15.000 euros destinadas a los damnificados por el volcán
Los donantes tendrán un plazo de 15 días para recuperar sus objetos
Una vez cumplido este plazo, los objetos se destinarán a su fin benéfico inicial
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Nº4 de Granadilla de Abona (Tenerife) ha dejado en libertad provisional por un delito de estafa al varón que supuestamente se quedó con donaciones dirigidas a los damnificados por el volcán de La Palma valoradas en 15.000 euros con intención de venderlas en tiendas de segunda mano.
Según informa el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC), la autoridad judicial ha adoptado esta decisión tras tomar declaración el hombre, que tendrá la obligación de comparecer los día 1 y 15 de cada mes ante el juzgado. En cuanto a los objetos que presuntamente se apropió el varón, están siendo custodiados por la Guardia Civil para que los donantes tengan la opción en un plazo de 15 días de recuperar su donaciones.
Una vez cumplido este plazo, y si las personas no han requerido los objetos, los mismos se considerarán como objeto mueble abandonado y se destinarán a su fin inicial, que era ayudar a las personas que han perdido sus casas por la erupción volcánica.
Se ofreció a trasladar las donaciones de Tenerife a La Palma y se las quedó para venderlas
El detenido ofreció su ayuda a una asociación benéfica de Tenerife para trasladar hasta La Palma los enseres y la comida que había logrado recolectar, precisa la Guardia Civil en un comunicado. El supuesto estafador se hizo pasar por un gestor de una falsa asociación solidaria y aportó tres contenedores para cargarlos con todas las donaciones.
Tras demorarse el transporte, la asociación afectada contactó con él para conocer los motivos del retraso, y recibió como respuesta un vídeo en el que se veía a varias personas realizando una descarga y reparto de enseres. Sin embargo, las imágenes eran antiguas y no correspondían con ningún traslado real a la isla de La Palma.
Los investigadores han comprobado que los contenedores se encuentran en el mismo lugar donde fueron llenados, en la localidad de San Isidro. Guardias civiles de Granadilla de Abona han llevado a cabo varios registros autorizados por el juzgado de instrucción número 4 de dicha localidad.
