Hasta aquí bien. Lo malo viene cuando esa carta no la firman ni Francia ni Alemania. Si preguntamos al Presidente del Gobierno su respuesta es sencilla. No es una carta que vaya en contra de nadie, queremos las reformas ya, y las queremos de verdad. Menos debatir y más actuar. Eso sí, cuando uno se pasa 3 horas en la puerta de esa famosa casa que pone un número 10, y pone el oído para escuchar a la prensa británica, uno se da cuenta de que en el Reino Unido se frotan las manos. O más. El pensamiento más común es que se abre un frente Reino Unido-España contra el eje franco-alemán. Oficialmente y desde España esto se niega rotundamente. Pero la rueda de prensa ha dado para mucho más. Por ejemplo Gibraltar. Si Rajoy dice que existen diferencias pero que se abrirá un diálogo, Cameron dice que de diálogo nada. No hablaremos si no entran en la conversación los gibraltareños. Ahí queda eso, y escuchado directamente por Mariano Rajoy. Todo esto lo dejamos en el plano de la política internacional porque lo de la política nacional tampoco ha tenido desperdicio.
Primero la contestación a una carta que los sindicatos han mandado al Presidente pidiéndole que pare la reforma laboral y abra un periodo de negociación. Esa es la petición. La rotunda contestación es directamente un no y mucho más grande que el no de Cameron a Rajoy sobre Gibraltar. Sé, ha dicho Rajoy, que hay cosas que no gustan ni a la CEOE ni a los sindicatos, pero nosotros gobernamos para la gente. Esperar un cambio, ha proseguido, no voy a engañar a nadie, no sería bueno ni para España ni para los españoles. Y hay que seguir porque la intensidad no ha bajado. El siguiente asunto pendiente y muy de actualidad eran las protestas de Valencia y la carga policial. El planteamiento es el miedo o no de que las movilizaciones se extiendan por el resto del país. El presidente ha reconocido lógicamente el derecho a manifestarse y expresar su opinión de todo el mundo pero... Pero todo el mundo tiene que entender "que la policía tiene funciones que cumplir reconocidas por la Constitución". Para Rajoy es conveniente que todo el mundo actúe con mesura para que este tipo de cosas no vuelvan a ocurrir.
Mucha información en una rueda de Prensa de 15 minutos en el que se han permitido dos preguntas a los periodistas británicos y dos a los periodistas españoles. A partir de aquí los coches oficiales salían a toda velocidad. La siguiente visita era al proyecto Crossrail, el mayor proyecto de infraestructuras actualmente en ejecución en Europa y en el que intervienen tres empresas españolas. Se trata del cercanías londinense que cruzará Londres de Este a Oeste, enlazando el aeropuerto de Heathrow, el centro de Londres, la City y Canary Wharf. Rajoy y Cameron han podido observar las inmensas tuneladoras y el transcurso de las obras.
La última reunión se ha producido en la embajada de España y ha sido con el vice primer ministro Nik Clegg. Clegg le ha dicho a Rajoy que era muy valiente por esa reforma laboral. Rajoy le ha contestado volviendo a reconocer que no va dar su fruto en el corto plazo.
El jueves el turno de visita es para Roma y Monti.