El pleno del Congreso ha rechazado una iniciativa de CiU que afirmaba que "el Gobierno no puede tomar decisiones unilaterales sin hacer partícipes a los Aliados en tiempo y forma" en cuestiones como la salida de Kosovo, anunciada el pasado 19 de marzo.
Jordi Xuclà, portavoz de Defensa de CiU, no ha aceptado la enmienda del PP para reprobar a la ministra, ni tampoco otras presentadas por ERC-IU-ICV, una de las cuales instaba al Ejecutivo a reconocer la independencia de la región balcánica.
La Cámara ha votado por separado los cuatro puntos de la moción consecuencia de interpelación de CiU, tres de los cuales (relativos, entre otras cosas, a informar al Congreso sobre los resultados de las Cumbres anuales de jefes de Estado y de Gobierno de la OTAN) han sido aprobados con 338 votos a favor y cuatro abstenciones (de ERC y Nafarroa Bai).
Sin embargo, ha sido rechazado con 172 votos en contra (PSOE, IU, ICV y BNG), 164 a favor (CiU, PP, PNV, CC y UPyD) y 5 abstenciones (ERC, Na-Bai y UPN) el punto en el que se afirmaba que el Gobierno "no puede tomar decisiones unilaterales sin hacer partícipes a los Aliados en tiempo y forma de su voluntad de modificar los compromisos adoptados en las organismos multilaterales".
Xuclà ha justificado su moción asegurando que el Gobierno no sólo no ha cumplido con la Ley de la Defensa que el PSOE impulsó, al no pedir la autorización del Congreso para la retirada de los soldados, sino que además anunció el repliegue sin comunicarlo debidamente a los aliados.
Formas que, a su juicio, tienen "mucho más de improvisación" y de "política interna" del Gobierno y el PSOE que "de seriedad".
Beatriz Rodríguez-Salmones, portavoz de Defensa del PP, ha justificado su petición de reprobación de Chacón -única miembro del Gobierno que asistió esta tarde al pleno, para atender precisamente este punto-, alegando que la gestión de la retirada ha tenido consecuencias dentro y fuera del país.
Rodríguez-Salmones ha recalcado que, aunque los aliados hayan dicho que se ha pasado página, "todos sabemos que estas cosas se memorizan", y además no se informó al Consejo de Defensa, al Consejo de Ministros ni al Parlamento, y se utilizó al servicio exterior del Estado "como apagafuegos", colocándolo en "una situación de ridículo".
No obstante, los populares han apoyado la moción de CiU, cuyo cuarto punto "supone una verdadera sanción al Gobierno, la misma que han formulado los aliados, la opinión pública y los medios de comunicación".
Gaspar Llamazares, en nombre de ERC-IU-ICV, ha coincidido en que el anuncio de retirada fue "manifiestamente mejorable", pero ha considerado que lo verdaderamente grave es que se haya decidido el repliegue sin la autorización del Parlamento.
Ha asegurado, además, que su grupo no participará en "ningún intento de reprobación sibilino", algo en lo que ha coincidido la diputada de UPyD, Rosa Díez, al entender que las reprobaciones al Gobierno han de hacerse a través de mociones de censura con alternativas positivas.
Díez, en todo caso, ha apuntado que las cosas "se hicieron mal y se explicaron peor", y hubo "descoordinación e improvisación", y por ello ha apoyado la moción completa de CiU.
También ha votado a favor el PNV, cuyo portavoz de Defensa, José Ramón Beloki, se ha sumado a las críticas por cómo se tomó y anunció la decisión, que debió hacerse "con mucho más tino".
Por su parte, el portavoz del PSOE, Jesús Cuadrado, ha arremetido contra la intención del PP de reprobar a la ministra asegurando que este grupo "sitúa el interés de España en el lugar donde puedan hacer daño al Gobierno", y ha advertido a los populares que en esta intención "están solos, en el Parlamento y en la calle".