Montserrat Corulla, la presunta testaferro del supuesto cerebro de la trama de corrupción en Marbella (Málaga), Juan Antonio Roca, ha asegurado este lunes en la sesión del juicio del caso 'Malaya' que "jamás he coaccionado en mi vida a nadie" y que sólo ha tenido "cuatro comentarios" en los pasillos con la que fuera su secretaria Úrsula Quinzano, quien, en su declaración, aseguró que se sintió "presionada" por ésta y que "jamás" recibió instrucciones de Roca.
Corulla, que ha participado en esta sesión después de que el Tribunal encargado de enjuiciar el caso 'Malaya' acordara que acusados que ya comparecieron en la primera parte de este bloque dedicado al blanqueo de capitales participaran de nuevo en esta parte, ha dicho estar "impactada" por las "cosas que han dicho de mí", en referencia a la declaración de Quinzano y ha añadido que ni tan siquiera ha podido escuchar la declaración porque "no he sido capaz".
Así, ha señalado que pone en disposición de la Sala "todas y cada una de las facturas de mis teléfonos fijos y móviles" para, tal y como ha explicado, "probar que jamás he tenido una relación con Úrsula Quinzano más allá de cuatro comentarios en los pasillos y frente a su abogada, es decir, estando su letrada presente".
Corulla ha afirmado que Quinzano "no era más que una secretaria que realizaba gestiones de secretaria y administrativa, nada más". En este punto, ha recordado que Quinzano era administradora de Jabor Magarpe, "porque así lo decidió el señor Manuel Sánchez Zubizarreta --también acusado en esta causa--".
Además, la presunta testaferro de Roca ha aclarado que "nunca" ha tenido "ningún tipo de relación" con la citada sociedad: "no he tomado nunca ninguna decisión, como así ha dejado claro la declaración de Roca y del propio Sánchez Zubizarreta".
Por otro lado, ha dicho no entender las declaraciones en las que se decía que Úrsula Quinzano no tenía ningún tipo de relación directa con el principal acusado, cuando, "el propio Roca ha declarado que era su secretaria en Madrid". "Existía una relación clara, y no porque lo diga yo sino porque obra en todas las conversaciones que han sido intervenidas en el despacho", insistiendo en que esas conversaciones "están intervenidas y transcritas".
DEFENSA DE EXSECRETARIA
En este punto, la defensa de Quinzano ha afirmado que "esta señora --en referencia a Corulla-- ha tenido ya la oportunidad de declarar lo que, a su entender, era procedente para su defensa", añadiendo que, además, "es la única procesada a la que el señor presidente le ha dado la oportunidad de exponer en el plenario cuatro veces más".
"La señora Úrsula es la única procesada que se ha vestido por los pies; es la única, que si el Tribunal lo está viendo, no ha estado en connivencia con ninguno de los demás procesados y ha declarado lo que a ella se le había producido en su persona", ha concluido la letrada.
ROCA
Por su parte, el presunto cerebro de la trama, que también ha declarado tras el acuerdo al que llegó el Tribunal, ha contestado a las preguntas de la defensa de Manuel Sánchez-Dalp, que vendió junto a su hermano, también acusado en el caso 'Malaya', una ganadería a Roca y ha explicado la relación de amistad y de negocios con la familia.
Roca ha recordado que en una capea le propuso a Sánchez-Dalp comprar una partida de ganado y se llevó a cabo. También ha añadido que, en un principio, el precio "me pareció excesivamente caro" si se dividía entre el precio que se puso y el número de cabezas, añadiendo, en este sentido, que después le aclararon que en ese precio iba incluido un hierro "que iba a pasar la prueba y que iba a ser de primera", por lo que, el precio "me pareció más interesante". Por último, ha insistido en que el precio se pagó con unos pagarés.
Tras la segunda intervención, Roca, después de concluir las preguntas de los abogados defensores sobre varias sociedades, se ha negado a contestar a las acusaciones, en concreto, al fiscal, al tiempo que ha dicho que "el señor fiscal no me ha traído aquí como imputado, no me ha permitido que yo pueda hacer delimitación de pruebas, no ha permitido que yo pueda traer testigos y no entiendo por qué me pregunta ahora".
En este punto, ha señalado que la Sala ha admitido las pruebas pero se ha preguntado "por qué el fiscal no lo ha hecho antes". "Lo lógico hubiera sido que me permitiera declarar con todas mis garantías", ha añadido Roca. No obstante, el presidente, José Godino, le ha indicado que "la Sala le permite traer toda las pruebas que quiera desde el principio; si quiere contestar conteste, si no, no conteste", tras lo que ha vuelto a negarse.
Además del presunto cerebro de la trama y Corulla, también han declarado los acusados, que ya intervinieron en el primer bloque, como los miembros del gabinete jurídico Sánchez Zubizarreta Soriano Pastor; Sergio Santana y Salvador Gardoqui, entre otros.
En esta sesión del juicio también ha declarado uno de los investigadores de 'Malaya' quien ha reiterado que "la estructura societaria de Roca funciona por el principio de unidad de caja", ya que, tal y como ha explicado, si alguien, dentro de la citada estructura, "necesita fondos en efectivo se puede aplicar a diferentes sociedades".