Los productos de EE.UU. afrontan barreras comerciales en 63 países, según un informe

AGENCIA EFE 01/04/2009 00:44

El informe, que por ley es entregado al Congreso, destaca las barreras al comercio y la inversión de EE.UU. en 2008, y la respuesta del Gobierno.

Las exportaciones conforman el 13 por ciento de la economía estadounidense y, según USTR, el empeño en la apertura de mercados está dirigido, sobre todo, a "abrir nuevas avenidas a empleos bien remunerados para más estadounidenses".

El informe señaló que las barreras a las exportaciones agrícolas de EE.UU. en la Unión Europea (UE) "siguen siendo fuente de frustración", porque las carne de res, pollo y cerdo, el fríjol de soja y el arroz han sido "restringidos o excluidos".

Además, a EE.UU. le preocupan las medidas de la UE y países miembros que "subsidian el desarrollo, producción y comercialización de aviones civiles".

También destacó las preocupaciones sobre las políticas que rigen los productos farmacéuticos y de cuidado de salud, así como las quejas de exportadores estadounidenses sobre "ciertas políticas de la UE que podrían interrumpir el comercio en sectores críticos como la regulación de nuevos productos químicos".

En el apartado sobre México, USTR se quejó, entre otras cosas, de medidas sanitarias y fitosanitarias que "han creado barreras" a productos como granos, semillas, manzanas, cárnicos, cítricos y madereros, entre otros.

Agregó que en México son "extensas" las violaciones en torno a la protección de los derechos de propiedad intelectual, pese al compromiso del Gobierno de ese país, y que a EE.UU. le preocupan "los altos niveles de piratería y falsificación" de productos.

A EE.UU. también le inquieta el "debilitamiento" de las protecciones y aplicación de los derechos de propiedad intelectual en Chile, en particular la piratería de películas, música y software.

Sobre Colombia, USTR destacó que "la Administración Obama ha indicado que pronto, pero de forma responsable, responderá a los asuntos en torno al Tratado de Libre Comercio", estancado en el Congreso desde abril de 2008 por preocupaciones sobre la violencia dirigida a los sindicalistas.

USTR dijo que, en la actualidad, revisa la aplicación de todos los acuerdos comerciales que ha suscrito EE.UU., en especial en torno a las normas laborales y ambientales; responderá a las barreras "más significativas", y buscará cómo resolver disputas de forma bilateral o multilateral.

Agregó que busca reducir barreras como los requisitos de certificación a más de 1.200 bienes al consumidor; nuevos requisitos para el registro e inspección de una amplio gama de importaciones, y la deficiente aplicación de medidas contra la piratería y los derechos intelectuales.

Además, tiene en la mira la "falta de transparencia" en la aprobación para productos biotécnicos, impuestos indirectos y "discriminatorios" a los productos estadounidenses, subsidios ilegales a las exportaciones, y limitaciones a la participación extranjera en los mercados de telecomunicaciones a través de una "multiplicidad de barreras".

En el análisis, USTR reitera el compromiso de continuar trabajando con el Congreso "para hacer cumplir la ley comercial" del país.

"Tenemos que abrir nuevos mercados en todo el mundo para los granjeros, manufactureros, agricultores y proveedores de servicio de EE.UU., a la vez que aseguramos que los trabajadores estadounidenses aprovechan los beneficios prometidos" de los acuerdos comerciales, dijo el titular de USTR, Ron Kirk.

La meta, según Kirk, es que "el comercio funcione a favor de las familias estadounidenses".

Kirk consideró que las acciones que tome USTR en contra de los obstáculos comerciales ayudarán a impulsar los esfuerzos de recuperación económica del país, la competencia "justa" y la "responsabilidad social".

Max Baucus, presidente del Comité de Finanzas del Senado, dijo que las barreras comerciales "perjudican a los negocios estadounidenses", y deben corregirse, por lo que presentará un proyecto de ley para hacer cumplir los acuerdos en vigor, pero no precisó cuándo.