El concejal del PSE-EE en el Ayuntamiento de San Sebastián Denis Itxaso ha advertido de que, tras el asamblearismo que propone Bildu, "se esconde la intención" de convertir la Semana Grande y otros eventos festivos de la capital guipuzcoana en "una gran txozna, un escaparate para su forma de entender la fiesta mezclada con la política".
En una rueda de prensa, Itxaso se ha referido, de esta manera, a las intenciones de Bildu de llevar a cabo procesos participativos para modificar las fiestas de la Semana Grande en próximas ediciones y ha recordado que el actual modelo festivo "responde a un amplio consenso social, legitimado y ratificado anualmente con la asistencia y participación de miles de ciudadanos".
El edil socialista ha recordado a Izagirre que desde hace años, de la mano de Odón Elorza, se celebran talleres sobre el programa festivo en los que diferentes sectores de la ciudad "plantean sus ideas e iniciativas para enriquecer el programa" y que, según ha dicho, "han ido moldeando la estructura" de la actual Semana Grande.
"De ahí nacieron ideas como las discotecas al aire libre en las terrazas del Kursaal, las romerías que se celebran en el monte Urgull, los diferentes concursos gastronómicos, las pruebas deportivas en la playa, o incluso que la fiesta comenzase en sábado para así aprovechar dos fines de semana", ha destacado.
Asimismo, ha apuntado que fruto de la iniciativa popular fue la aparición de Los Piratas "a los que progresivamente se les fue incorporando en la programación festiva, pasando este año de su escenario de la Plaza de la Trinidad al Muelle, por acuerdo con la Consejería de Transportes del Gobierno vasco".
Por ello, Itxaso ha insistido en que, "por mucho que quieran vestirse como adalides de la participación y más en temas festivos, desde hace muchos años ya se viene desarrollando este proceso que ha mejorado una programación que, precisamente, no ha contado con el cariño del sector de la izquierda abertzale al que representa el actual alcalde".
De este modo, ha subrayado que la Semana Grande no puede convertirse en un "juguete" en manos del Gobierno "de turno", porque es una fiesta "de todos y los intentos de politización solo la empeorarán", al tiempo que ha remarcado que la Aste Nagusia donostiarra "no es la fiesta patronal de la ciudad y quien quiera hacer un símil con otras fiestas cercanas se equivoca".